Vestidos con las togas que emplean en las salas de vistas y las batas que portan en los centros sanitarios en su quehacer diario, los profesionales de la abogacía y la sanidad han explicado que ambos colectivos comparten «principios fundamentales» como son la defensa de la vida y de la integridad física de las personas, así como la justicia y la democracia. Por ello, la auxiliar de enfermería Zaida Casales y el abogado Félix Cañada, en nombre de los reunidos, han exigido que «se acabe ya con el uso y el abuso vengativo de la ley como arma política para causar daños añadidos a las personas presas y a sus entornos familiares».
Frente a esa política, han reivindicado «los derechos humanos para todas las personas. También, y en este caso especial, para las que se encuentran privadas de libertad».
Los profesionales vinculados a la sanidad han expresado su oposición a «una legislación de excepción, alejada de los derechos humanos» que, han denunciado, «se traduce en que el derecho a la salud y el acceso a la sanidad se discriminen en función del delito o la pena de las personas encarceladas».
A la espera de que se resuelva el caso de Ibon Iparragirre mientras no se excarcela a otras personas con enfermedades graves o incurables hasta llegar a situaciones límite por expresa orden del Gobierno español, han manifestado que «condicionar esa libertad a un fallecimiento inminente es tan despreciable como ajeno al común de las leyes europeas al respecto»
Su llamamiento a participar en la manifestación de Sare del 13 de enero en Bilbo estiman que supone «dar un paso más en el camino de la resolución, la paz y la convivencia». Han recordado que después de seis años transcurridos desde que ETA anuncia su decisión de abandonar la lucha armada, los estados francés y español vulneran «claramente» los derechos de las personas presas. «El nuevo tiempo en el que nos encontramos, tras décadas de violencia, de muchas violencia y sufrimientos, requiere una nueva forma de mirar al futuro. Este tiempo nuevo –han defendido– exige que prevalezca la equidad y la justicia sobre el odio y el rencor».