Con la legitimación recibida en el Parlament esta mañana, Carles Puigdemont ha dado esta tarde el largamente anunciado paso a un lado, apartándose de la carrera por la investidura «provisionalmente» y oficializando la candidatura de su número dos y expresidente de la ANC, Jordi Sànchez, para ocupar la presidencia de la Generalitat en Catalunya.


Así lo ha anunciado en un vídeo divulgado a través de las redes sociales, en el que también ha anunciado que en los próximos días convocará una «solemne reunión» de cargos electos en Bruselas, con el objetivo de constituir un Consell de la República que ayude a internacionalizar «política y jurídicamente» el conflicto catalán.


De hecho, Puigdemont ha anunciado ya una primera iniciativa emprendida esta tarde, que consiste en presentar una demanda contra el Estado español ante el Comité de Derechos Humanos de la ONU.


«Que todos tengan claro que no claudicaremos ante la actuación ilegítima de los que han perdido en las urnas ni ante la arbitrariedad de los que están dispuestos a pagar el precio de abandonar el estado de derecho y la justicia para defender la unidad de la patria», ha subrayado Puigdemont, antes de concluir su discurso: «Tengo plena confianza de que ganaremos, y que un día, espero que bien pronto, pueda regresar a Catalunya como un hombre libre».


A efectos prácticos, Puigdemont también ha anunciado que en las próximas horas pedirá al president del Parlament, Roger Torrent, que inicie una nueva ronda de contactos con los grupos parlamentarios para nombrar a Sànchez como nuevo candidato a la investidura. La ronda comenzará, previsiblemente, a inicios de la semana que viene.