Cumplido el plazo para impugnar la sentencia que absolvía a GARA, a NAIZ y a la abogada de la familia Cabacas, Jone Goirizelaia, desestimando íntegramente la demanda presentada por Iñaki Larrea, el conocido en esta causa como «Ugarteko» no ha presentado recurso de apelación, por lo que el caso se da por cerrado.

«Ugarteko» presentó inicialmente una demanda de 770.000 euros, que para ir a juicio rebajó a 250.000, contra GARA, NAIZ, Iñaki Soto, Iñaki Iriondo y Jone Goirizelaia, por los supuestos perjuicios que para su salud, vida social y carrera profesional supusieron la publicación de las órdenes que dio la noche en la que la Ertzaintza hirió mortalmente de un pelotazo en la cabeza a Iñigo Cabacas, el relacionar su orden de «entrar con todo» con el fatídico golpe, y el haber dado a conocer públicamente su identidad.

La jueza dejó claro que GARA y NAIZ actuaron ateniéndose a las reglas profesionales del periodismo, ofreciendo una información veraz y de relevancia pública, y de acuerdo con los principios de la libertad de expresión.

La sentencia también deja claro que, al contrario de lo que sostenía el demandante, la abogada Jone Goirizelaia no dio a conocer públicamente el número profesional de Ugarteko, lo que paradójicamente quedó acreditado en el juicio oral en los dos vídeos aportados por la propia acusación. También se deja claro que su labor se rigió por criterios profesionales.