GARA
EL CAIRO

Los egipcios acuden a partir de hoy a las urnas con Al Sisi como único favorito

Los egipcios votan a partir de hoy para elegir a su presidente, en unos comicios donde el único con opciones es el actual líder del país, Abdel Fatah Al Sisi, que únicamente se enfrenta a un desconocido Musa Mostafa Musa, uno de los más fervientes apoyos del mandatario.

Unos 60 millones de egipcios de cerca de 100 millones de habitantes del país más poblado del mundo árabe, están llamados a votar los días 26, 27 y 28 de marzo. Deberán elegir entre el presidente saliente, Al Sisi (63 años), que parte como gran favorito, y un gran desconocido, Musa Mostafa Musa, de 65 años. Este último, uno de los más fervientes apoyos del mandatario, decidió presentarse para evitar que Al Sisi se presentara solo.

«Musa Mostafa Musa tiene pocas posibilidades de alcanzar un número significativo de votos (...) Mucha gente ni siquiera sabe que se presenta», estimó Mostafa Kamal el Sayed, profesor de Ciencias Políticas en la Universidad de El Cairo.

En una entrevista con la televisión esta semana, Al Sisi dijo que si no tenía rivales serios en las elecciones, no era culpa suya.

En 2014 también compitió con un solo competidor, Hamdeen Sabbahi, un veterano político que gozaba de mucha más notoriedad que Mostafa Musa.

En este contexto, la gran interrogante será la abstención. En las últimas presidenciales, la tasa de participación alcanzó el 37% tras dos días de elecciones. Las autoridades decidieron prolongarlas un día más y la participación fue del 47,5%.

Según Kamal el Sayed, «el resultado se sabe por adelantado y eso no anima a los egipcios a ir a votar. Y no ha habido tiempo para una campaña».

Las ciudades, especialmente El Cairo, están inundadas de retratos de Al Sisi, hacia el que se prodiga un verdadero culto a la personalidad. En pocos carteles aparece Mostafa Musa.

Graduado en la academia militar en 1977, estudió en Gran Bretaña y Estados Unidos, antes de convertirse en jefe de inteligencia militar bajo Hosni Mubarak. En 2013, siendo ministro de Defensa y comandante en jefe del Ejército, lanzó un sangriento operativo para reprimir a los simpatizantes del derrocado Mohamed Morsi –primer presidente civil elegido democráticamente–, que se saldó con la muerte de centenares de manifestantes islamistas en unas semanas. Al Sisi ha emprendido una sangrienta represión contra la oposición islamista y la liberal. Varios miles de simpatizantes de Morsi fueron ejecutados o encarcelados y cientos, incluyendo al propio expresidente, fueron condenados en procesos muy criticados por la ONU.

Según Reporteros Sin Fronteras, 30 periodistas están encarcelados en Egipto y cerca de 500 portales de internet bloqueados.