Tres jornadas consecutivas perdiendo es un lujo que el Alavés no puede permitirse, sobre todo estando tan cerca de materializar su objetivo y de lo mal que lo pasó en el primer tramo de la temporada, donde casi todo el mundo ya lo daba como un equipo desahuciado.
Para Rubén Duarte, la causa de esta última mala racha es el hecho de que el conjunto babazorro se haya visto con un colchón de puntos respecto del descenso –diez, ahora mismo–, que le ha llevado a relajarse y «eso no puede ocurrir». «Si no estamos al 200%, somo un equipo vulnerable», dijo tajante.
El defensa recordó que «han sido unos meses muy intensos y hemos tenido mucha presión psicológica porque la temporada empezó muy mal y cada partido era una final», una situación que se consiguió revertir coincidiendo con la llegada de Abelardo al banquillo, gracias a un trabajo que ahora no se puede echar por la borda.
De hecho, apostó después de esos tres últimos malos resultados por darle una vuelta de tuerca, pensar cómo solucionar los errores y unirse más que nunca, debido a que se está «en el momento más importante de la temporada».
Esta última fase de la campaña va a coincidir con el hecho de que el futbolista andaluz va a tener más competencia por el lateral izquierdo, tras la recuperación de Héctor Hernández. «Me alegro por él, porque lo ha pasado mal. Héctor es más ofensivo y yo soy más defensivo, porque empecé como defensa central, pero hay una competencia sana y jugará el que lo merezca», subrayó el almeriense.
Agradecimiento
Duarte regresará a la que fue su casa durante los dos últimos ejercicios, «muy buenos e ilusionantes». Solo tuvo palabras de agradecimiento para un Espanyol que le ayudó a «aprender y crecer como jugador». Sin duda, será un partido «especial» para él, aunque «uno más para cumplir el objetivo de la permanencia». Apuntó, además, que el plantel periquito es «un gran rival» que se ha hecho «fuerte en casa», donde ha vencido a los conjuntos europeos, aunque avisó de que el Alavés «ha plantado cara en campos difíciles»..
Tras firmar con el club gasteiztarra para las tres próximas campañas, el futbolista reconoció que su vida no ha variado mucho en la capital alavesa, dado que se trata de dos entidades deportivas «humildes y trabajadoras». En ese sentido, resaltó que ambos clubes coinciden en muchos aspectos, pero especialmente en que «el trato al jugador no puede ser mejor».