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Sindicatos policiales consideran que los clubes deben pagar por los dispositivos de seguridad

Representantes de organizaciones sindicales policiales han coincidido en una jornada organizada por ErNE en Bilbo en la necesidad de que los clubs de fútbol paguen parte de los operativos policiales desplegados con motivo de partidos de alto riesgo, así como los daños causados por los hinchas.

Operativo de la Ertzaintza en San Mamés en el Athletic-Spartak. (Luis JAUREGIALTZO / ARGAZKI PRESS)
Operativo de la Ertzaintza en San Mamés en el Athletic-Spartak. (Luis JAUREGIALTZO / ARGAZKI PRESS)

En la rueda de prensa para dar a conocer las conclusiones de la jornada, el secretario general de ErNE, Roberto Seijo, ha indicado que el objetivo de esta jornada ha sido acordar «una hoja de ruta» con medidas para prevenir y erradicar la violencia en el deporte, y, más en concreto, la que se produce en torno al fútbol.

En la reunión han participado, junto a Roberto Seijo, el secretario de organización del SUP de la Policía española, Ramón Cosio, el secretario de organización del SPC de Mossos Esquadra, Fran Reina, el secretario del Sindicato de Policía Foral de Navarra, Alvaro Escudero, Ricardo González, miembro policial de la Comisión Antiviolencia en Madrid, la presidenta de EuroCop, Angels Bosch, además, César Charro, del Observatorio Vasco de Seguridad, y dos agentes de la Policía Británica, pertenecientes a la BTP (Unidad de Tránsito), Wayne Mitchell y Catherine Daley.

El responsable del SUP, Ramón Cosio, ha indicado que, una de las principales conclusiones de la jornada es «la necesidad del copago», porque «estamos afrontando desde la seguridad pública el coste ingente de lo que supone un partido de alto riesgo de un Madrid, Barcelona, o Athletic de Bilbao, con desplazamiento de miles de policías en algunos casos». «Es un gasto ingente que corre a cargo de la seguridad pública y que en ningún caso tiene coste para los clubs de fútbol», como tampoco tiene coste para los clubs «los daños que se producen en mobiliario público o en intereses privados».

En opinión de los participantes en la jornada, «transferir esta responsabilidad económica a los clubs conllevaría que pondrían mucho más interés en colaborar con la seguridad pública».

Desde ErNE han criticado la «falta de implicación» de los clubs de fútbol y de las instituciones deportivas, «que tienen una gran responsabilidad sobre toda la violencia que se produzca en torno al fútbol».

Por su parte, la presidenta de EuroCop, Angels Bosch, ha señalado que, en caso de las policías autonómicas, «las plantillas están por debajo de lo que deberían ser» debido a los«"grandes recortes» y, muchas veces, «no se dispone de los medios humanos y técnicos adecuados». Por ello, durante la jornada se ha planteado la posibilidad de que la Policía española «pudiera dar soporte» a las policías autonómicas «en casos puntuales» cuando se celebren eventos deportivos de riesgo, porque «también son competentes en Euskadi, Catalunya o Navarra».

Ejemplo de Gran Bretaña

Wayne Mitchell ha asegurado que las medidas implantadas en Gran Bretaña tras las tragedias de Bradford han sido «muy efectivas» y el marco legislativo actual es «muy positivo» y trata de «involucrar a todos los aficionados, desde una edad temprana». Además, se trabaja «con todos los hinchas, no solo con los de riesgo», y se ha creado «un diálogo muy positivo con los clubs».

El responsable policial británico se ha referido al próximo mundial de fútbol de Rusia y ha indicado que en Gran Bretaña existen 1.700 hinchas que tienen «una orden de prohibición», que supone que «cinco días antes de que comience el torneo tiene que entregar sus pasaportes en la policía local y no pueden viajar, ya que se retiene ese pasaporte hasta el último partido de su equipo».