Entre lágrimas y muchos nervios, el capitán armero, que cumple 28 años en unas semanas, ha leído un emotivo comunicado en el que ha recordado que «acabada» su etapa de juvenil en la Real Sociedad tuvo que hacer las maletas primero a Alicante y luego a Getafe, antes de ser recuperado por la Real e inmediatamente cedido al Eibar, que entonces se hallaba en Segunda B.
«Sólo pensaba en llegar a Segunda con el Eibar, pero jamás pensé que llegaría a jugar en Primera División», ha indicado el centrocampista de Zumarraga, quien se ha referido al técnico Gaizka Garitano como su «padre protector» en el fútbol, y que ha asegurado que Jose Luis Mendilibar le ha «enganchado con su forma de entrenar y de jugar».
«Tuve que evolucionar rápido, como el Eibar, pero el primer año en Primera División hubo momentos en los que me vi superado mentalmente. Cuando llegué al Eibar pensé que no iba a ser importante y que me tocaría estar mucho en el banquillo», ha explicado.
Dani García ha revelado que su plan «era hacer historia con el Eibar y quedarme aquí toda la vida», pero que han ido «pasando momentos y oportunidades» y que ahora necesita «un nuevo reto». En los mentideros futbolísticos se le viene situando en el Athletic desde hace bastante tiempo.
«Estoy sufriendo bastante y sé que estas últimas semanas serán duras para mí, pero tengo que mirar hacia adelante. Me cuesta mucho marcharme de un lugar en el que soy feliz, porque es como irme de mi casa», ha explicado.
También ha agradecido el respaldo de la afición «sobre todo en los momentos malos y en otras categorías», y les ha pedido que nunca cambien «esa mentalidad» que les hace «tan especiales y diferentes».