La Real apenas ha inquietado al conjunto rojiblanco, que llegaba tocado tras sufrir en Alemania la derrota más dura de la era Simeone con el 4-0 que le endosó el Borussia Dortmund. Los madrileños han dominado de principio a fin.
Los tres puntos ponen al Atlético líder de la Liga con 19, uno más que el Barcelona antes del Clásico de este domingo en el Camp Nou y que el Espanyol, que ha empatado en Valladolid, y dos por encima de Alavés y tres de Sevilla, a la espera de que estos jueguen mañana.
Ante la falta de gol de los delanteros –Diego Costa ha vuelto a irse de vacío por decimoséptimo partido liguero consecutivo y Griezmann no anota desde principios de este mes ante el Brujas–, han sido los defensores los encargados de marcar: Godín al encontrarse un despeje de Raúl Navas, y Filipe con un derechazo soberbio a la escuadra.
En un partido en el que necesitaba reencontrarse con el triunfo, el técnico argentino Diego Pablo Simeone ha apostado por el montenegrino Stefan Savic como acompañante de Godín en la zaga, Lucas Hernández como lateral zurdo, el colombiano Santiago Arias en el derecho por la sanción de Juanfran y el argentino Ángel Correa como extremo.
Por su parte, Asier Garitano ha recuperado a Willian José como única referencia atacante con David Zurutuza como enganche, en un once sin Theo Hernández.
El conjunto rojiblanco ha arrancado llevando la iniciativa ante una Real que ha acumulado jugadores en el centro del campo y le ha obligado a buscar las bandas, con un impreciso Lucas por la izquierda y un tímido Arias en su estreno como titular en la Liga, pero sin disparos a puerta, más allá de un balón al larguero de Griezmann en una jugada ya anulada por fuera de juego.
La Real apenas se ha asomado pasados los primeros diez minutos, con una posesión sin veneno a la que el Atlético ha respondido con las apariciones de Correa desde la banda derecha, centros y pases interiores del rosarino como el que ha rematado Griezmann de media chilena por encima de la portería de Miguel Ángel Moyá, hoy de reencuentro con la que fue su afición el curso pasado.
El remate acrobático del delantero galo había sido lo más cercano que había estado el Atlético del gol pese a que llegó a ejecutar cuatro saques de esquina seguidos. Una falta de concreción que a punto ha estado de condenar Rubén Pardo con un disparo desde la frontal que se ha mrchado a la izquierda de Oblak y un segundo disparo desviado.
Ha sido en un nuevo arreón rojiblanco cuando ha llegado el gol, de nuevo con Correa como agitador, en una jugada desde la izquierda en la que ha regateado desde el suelo y ha buscado un pase raso hacia Diego Costa, interceptado por Raúl Navas, cuyo despeje se ha encontrado con Godín, que ha empujado el balón para hacer el 1-0 justo antes del descanso.
El resultado obligaba al conjunto donostiarra a proponer juego ofensivo en la segunda mitad, pero no ha sido así, sino que ha sido el Atlético el que ha buscado el segundo apoyado en las progresiones de Arias por la derecha, que ha llegado a realizar un remate, fuera.
El aviso del colombiano lo ha convertido en sentencia el brasileño Filipe Luis, que había ingresado al campo sustituyendo a Lucas, con molestias musculares, y que apenas un minuto después de la oportunidad de Arias ha enganchado un disparo con la pierna derecha desde la esquina del área, directo a la escuadra de Moyá.
Con el partido ya hecho, a punto ha estado Diego Costa de romper su mala racha, en una carrera al contragolpe tras el pase al espacio de Griezmann con el que ha llegado a plantarse ante Moyá, pero el meta balear ha sabido aguantarle en el mano a mano.
Lo ha buscado el de Lagarto hasta el final, y Simeone probablemente lo ha mantenido en el campo en búsqueda de ese tanto que no ha llegado, aunque a punto tuvo su segundo Godín, en un saque de esquina que ha controlado con el pecho en el área, pero al que se ha anticipado Moyá.