Ainara LERTXUNDI
DONOSTIA
Elkarrizketa
PACO ARÉVALO
EXPERTO EN SISTEMAS DE INFORMACIÓN GEOGRÁFICOS (SIG) DE MSF

Paco Arévalo: «Los mapas salvan vidas, nos permiten tomar decisiones muy rápidas»

El chileno Paco Arévalo comenzó a trabajar en Médicos Sin Fronteras (MSF) en 1993. Durante 14 años desempeñó su labor en escenarios como Sudán del Sur, Sudán, Kenia, Somalia, Ruanda, República Centroafricana, Indonesia, Irak o Haití. Referente de MSF en Sistemas de Información Geográficos (SIG) fue uno de los ponentes del congreso GeoEuskadi: Cartografía e Información, celebrado en Donostia.

El chileno Paco Arévalo es experto en Sistemas de Información Geográficos (SIG) de Médicos Sin Fronteras (MSF), una herramienta de alta tecnología que permite combinar mapas y datos para visualizar, evaluar e interpretar informaciones geográficas relevantes que pueden contribuir a una mejor y más eficaz acción humanitaria sobre el terreno, más cuando se trata de una emergencia. «Un buen mapa puede salvar vidas», asegura en entrevista con GARA.

¿Qué importancia tienen los mapas a la hora de diseñar las acciones humanitarias?

Te pongo un ejemplo. Un campo de desplazados en el que MSF no tiene equipos sobre el terreno. Una imagen satelital nos permite saber cuántas personas hay en el campo y las condiciones en las que están viviendo; esa información nos permite tomar decisiones muy rápidas y racionalizar recursos. Otro ejemplo, la organización de un campo de desplazados. Los mapas nos dicen dónde están las salidas de saneamiento, el agua, dónde hay que colocar los diferentes recursos que hacen falta… Nos ayudan a ganar mucho tiempo. Mira, este mapa satelital nos muestra la frontera entre Somalia y Etiopía, un lugar muy peligroso en el que la situación humanitaria se ha deteriorado mucho; no hay presencia internacional en la zona y las imágenes satelitales nos dicen cuántos desplazados había el mes pasado, cuántos hay en estos momentos… y esos datos nos permiten seguir la evolución del campo. Los mapas salvan vidas.

¿Cómo ha evolucionado la técnica a la hora de hacer un mapa?

Hoy en día todo es digital, todo está en la nube. Hay muchos proveedores de mapas, aunque en el ámbito de las tecnologías y en lo que se refiere a los SIG (Sistemas de Información Geográficos), el desarrollo es muy lento. Para poder visualizar un mapa complejo, con muchas capas de información, se necesitan ordenadores con mucha capacidad y potencia. Pero, estamos en la era digital, en la que el desarrollo de software es importante y creo que vamos hacia una situación en la que estas tecnologías serán muy útiles en cualquier ámbito.

¿Cómo articula MSF sus acciones humanitarias en base a la información de los mapas?

Hay dos ámbitos, uno el sanitario (datos médicos) propiamente dicho, y otro el no sanitario, como por ejemplo la ubicación de las letrinas, los puntos de agua... En el plano sanitario, las tecnologías nos permiten saber cuál es la tendencia de un brote epidémico. Si eres capaz de ver en un mapa con colores diferentes y por regiones, zonas y barrios la evolución de una enfermedad como el cólera en Yemen, podrás anticiparte y saber con antelación qué zonas son más vulnerables a contraer la enfermedad. En un mapa podemos ver los casos que se producen cada semana y en qué zonas o distritos, si estamos ante una enfermedad dinámica, si estamos ante el pico de la epidemia o, en cambio, empieza a remitir… Esa información me va a permitir tener una mejor preparación, hacer llegar con cierto margen los recursos y preparar también a la población.

Me viene a la mente la situación de crisis humanitaria que generó el ébola…

En el caso del ébola es muy importante saber de dónde vienen los pacientes, porque de ello depende la estrategia tanto a nivel clínico como social. Una vez que se detecta que una persona tiene la enfermedad, es importante hacer un seguimiento de su entorno, de su casa, de sus familiares, desinfectar los lugares en los que estuvo. A través de mapas y de la tecnología SIG podemos pintar de rojo los sitios de donde proceden los casos y si vemos que en una zona de la ciudad hay más manchas rojas que en otras, eso nos está indicando que tal vez debamos concentrar nuestra atención en ese lugar. Nos da indicios de la evolución de una enfermedad. Los mapas son como una señal de alerta, que en cada momento nos están dando información.

¿Y cómo se gestionan después las informaciones que proporcionan los mapas?

Una vez de que tenemos una pista de cómo puede evolucionar un brote en concreto, pues nos preparamos, lo que significa comprobar si tenemos acceso a esa área de la ciudad –tenemos que hablar con los actores armados, presentarnos antes ellos, explicarles quiénes somos y lo que hacemos y pedirles que nos garanticen la seguridad para acceder a esos lugares–. Eso nos va a permitir desplazar medicamentos a esa zona y, en su caso, organizar el transporte de los enfermos.

Usted ha trabajado sobre el terreno en muy diferentes contextos de conflicto. ¿Cómo se negocia con un actor armado?

Es bastante complejo. Lo primero es entender que cuando quieres acceder a un sitio y los actores armados, ya sean rebeldes o militares, te lo impiden, estás ante una situación crucial y que de ella depende que tengas o no acceso a esa población. Los escenarios varían de uno a otro, depende mucho de las personas. En los años 90, en el sur de Sudán te encontrabas en estos checkpoints con rebeldes borrachos. Sea cual sea la situación y el contexto, siempre tratamos de conectar con quien tenemos en frente; intentamos ser lo más empático posible para que ese actor armado que tenemos enfrente entienda lo que estamos haciendo. Tratamos de ponernos al nivel de esa persona, utilizando expresiones que sean de su comprensión, y hacerle comprender que somos neutrales y que trabajamos para ambos bandos; que si mañana resulta herido de bala lo atenderemos igualmente en nuestro hospital.

¿Qué herramientas ha llegado a utilizar para conectar con un actor armado determinado?

Cuando te enfrentas a una situación así, debes de hacer un análisis muy rápido de la persona; si habla tu idioma u otro que conozcas, si está o no borracho… y a partir de esa primera valoración tratas de ser lo más empático, como te decía. ¿Cómo conectas? Pues, con un cigarro, con una broma, no desafiándolo con la mirada, escuchando lo que te dicen, haciéndoles sentir importantes, que son líderes y, sobre todo, explicándoles lo que estás haciendo. Es importante que traslades una sensación de seguridad y neutralidad.

Ese carácter neutral, ¿impide denunciar?

Nosotros somos un actor humanitario; no estamos involucrados en la solución del problema. Estamos enfocados en la asistencia a las víctimas. Es verdad que en ocasiones Médicos Sin Fronteras realiza denuncias públicas, pero debemos de ser cuidadosos con ello porque denuncia tras denuncia fatiga un poco a la audiencia y, al final, no te creen. Y al denunciar algo o a alguien estás poniendo en riesgo las operaciones humanitarias en curso. Debes estar dispuesto a abandonar a una población a la que estás ayudando. ¿Cuándo pasamos a ese nivel? Es un dilema bastante grande para nosotros.

¿Se ataca deliberadamente la acción humanitaria? En el Mediterráneo, las ONG que se dedican al rescate de migrantes están en el punto de mira…

Sí, definitivamente. Se está dejando sin protección y asistencia a mucha gente, y eso es lo peor de todo. Estamos dejando sin ayuda a la gente que se está ahogando en el Mediterráneo, a quienes se están muriendo en Yemen, en Siria… Ese es el problema y lo que estamos denunciando. Una de las grandes dificultades en el ámbito de la ayuda humanitaria es el acceso a las poblaciones.

¿Cuáles son los retos más inmediatos?

Las tecnologías SIG aún son muy costosas; no son sostenibles para nosotros. Uno de los grandes retos a nivel técnico es que sean más baratas y accesibles. Necesitamos imágenes satelitales de ayer, no de hace unos años. Y esas imágenes son extremadamente caras. Pero la inversión en este tipo de tecnologías está salvando vidas. No tenemos mucha confianza en las grandes multinacionales que mapean el mundo porque solo hacen mapas de los lugares que les interesan, por ejemplo, no verás esos coches que sacan fotos de las calles y de las ciudades en República Centroafricana o Siria. Esta es la información que nos falta, por eso, MSF junto a la Cruz Roja estadounidense y británica ha creado el proyecto Missing Maps, que básicamente busca cartografiar los lugares más vulnerables del mundo, con el fin de que las organizaciones no gubernamentales internacionales y locales así como particulares podamos utilizar la cartografía y datos para responder mejor a una situación de crisis. Solemos convocar Mapathones, que suelen estar organizados por grupos e individuos de todo el mundo. Nos juntamos para cartografiar muy rápidamente un lugar específico del mundo. El 4 de octubre nos reunimos en la universidad de Sevilla para cartografiar unos barrios populares de Caracas.

En el plano humanitario, la situación de seguridad es cada vez más compleja. Ya no asistimos a conflictos en los que un acto se enfrenta a otro, sino que los conflictos y los actores son múltiples. Antes tenías que negociar con un actor, ahora, en cambio, tienes que estar negociando cada día con multitud de personas