Goia ha mantenido este martes una reunión en Madrid con la ministra de Defensa, Margarita Robles. Tras la cita anterior, celebrada en setiembre, ambas instituciones habían quedado emplazadas para «ver cuáles eran las necesidades que se planteaban para la construcción de un nuevo cuartel» que, según ha explicado el regidor donostiarra, «era la condición que se nos puso para poder avanzar en lo que a la ciudad le interesa, que es liberar los terrenos actuales».

La reunión se ha prolongado por espacio de una hora aproximadamente, tras la que ambas partes han quedado emplazadas a otro encuentro aún sin fecha para seguir trabajando al respecto. En la misma, Robles ha presentado al alcalde el planteamiento del Ministerio para la salida de los cuarteles de Loiola y la reubicación en otra parcela.

«Según la propuesta que nos ha lanzado hoy la Ministra, tiene que ser del mismo tamaño y las mismas características que las del actual cuartel. La conclusión es sabida de alguna manera, sabemos que no es una cuestión sencilla porque las exigencias que supone sustituir el acuartelamiento actual son elevadas y, desde ese punto de vista, el cuadrar que eso pueda ser factible no es sencillo», ha explicado Goia, que ha añadido que Defensa exige que el Consistorio asuma todos los gastos de construcción de una nueva instalación militar.

El alcalde ha subrayado que no quiere «generar falsas expectativas. Nosotros tenemos ahora que mirar algunas de las necesidades y de los números que se han planteado».

En estos momentos, el emplazamiento alternativo que se baraja es en la zona de Eskuzaitzeta, en Zubieta, donde se está construyendo la incineradora y otras instalaciones para la gestión de residuos.

Defensa les ha confirmado que otra de las propuestas, la de Antondegi, «se había descartado en una anterior ocasión y eso sigue siendo así. En este momento el lugar, de ser posible, es Zubieta pero tenemos mucho que hilar y muy fino para ver si eso es viable».