El Gobierno ruso salió ayer nuevamente en defensa del presidente de Venezuela, Nicolás Maduro, ante la presión a la que está siendo objeto tras la autoproclamación del jefe de la Asamblea Nacional, Juan Guaidó, como «presidente encargado», y la decisión de EEUU de imponer sanciones a la petrolera estatal Pdvsa, cuyos activos bajo jurisdicción estadounidense –7.000 millones de dólares– serán bloqueados.

El Kremlin calificó de «ilegales» y «erróneas» esas restricciones, a las que Washington estudia sumar otras medidas adicionales para confiscar, según Moscú, los fondos del país caribeño. A su juicio, «las más de las veces, es una manifestación de competencia desleal o, en este caso, la continua línea de injerencia abierta en los asuntos internos de Venezuela», por lo que indicó que Rusia está evaluando sus posibles consecuencias y aseguró que «defenderá sus intereses».

El viceministro ruso de Finanzas, Serguei Storchak, admitió que Venezuela tendrá problemas para efectuar el pago de la deuda –estimada en unos 3.000 millones de dólares– que ha contraído con Rusia, para la que la crisis en Venezuela podría suponer la pérdida de su principal aliado político en América Latina, pero también económico por sus importaciones e inversiones en el sector petrolero. En diciembre, Rusia prometió invertir 6.000 millones de dólares en el sector petrolero y minero del país.

China, apoyo financiero clave del Gobierno de Caracas, advirtió ayer de que las sanciones estadounidenses contra Pdvsa dañarán a la gente corriente y complicarán la situación, y expresó su oposición.

Estas sanciones podrían disparar los precios del crudo de aquellos mercados que dependen del petróleo pesado que exporta Caracas. Aunque la producción de petróleo ha caído en los últimos años, hay una parte importante de la industria petrolera mundial que necesita el petróleo pesado venezolano para mezclarlo con petróleos más ligeros y producir así gasolina y otros productos refinados.

Tropas a Colombia

Durante la rueda de prensa en la que la Casa Blanca anunció sanciones contra Pdvsa el lunes, el asesor de Seguridad Nacional, John Bolton, tenía escrito en su cuaderno «5.000 soldados a Colombia», aunque no mencionó ese hipotético envío de tropas. La Casa Blanca no dio explicaciones y el Pentágono ni confirmó ni desmintió la cuestión. Colombia aseguró que EEUU no lo ha planteado.

Mujica propone nuevas elecciones bajo supervisión de la ONU

El expresidente uruguayo José Mujica ha planteado formar una «junta ejecutiva» de unidad bajo una fuerte supervisión de la ONU como solución para la convocatoria de elecciones en Venezuela y superar así la crisis política en la que se encuentra inmerso el país caribeño y que, advierte, podría derivar en una guerra.

«¿Quién, con sentido común, hoy puede asegurar elecciones libres para todas las tendencias en Venezuela? (...). Esa magia podría ser solo con una especie de junta ejecutiva donde estuvieran todas las tendencias, pero fuertemente monitoreada y garantizada por Naciones Unidas», afirmó el lunes. Alertó, en cualquier caso, de que «están sonando fuertes tambores de guerra en el Caribe» y recordó que «en las guerras, en general, mueren los que no tienen responsabilidades». Mujica señaló, además, que «con sanciones económicas, se castiga a los pueblos y se fanatiza a los gobiernos, como pasó con la España franquista».

En Venezuela, su presidente, Nicolás Maduro, llamaba a desoír las convocatorias de la oposición e insistía en el diálogo para salir de esta crisis tras denunciar del nuevo «un golpe de Estado fantasmagórico» que sólo busca «dividir la Fuerza Armada» para que el país sea «ocupado por las fuerzas imperialistas».

Mientras el fiscal general, Tarek William Saab, solicitaba al Tribunal Supremo de Justicia que, como parte de una investigación preliminar, bloquee las cuentas e impida salir del país a Juan Guaidó, autoproclamado «presidente encargado», quien dijo no subestimar las «amenazas» y «persecución» de la Fiscalía. «Nada nuevo bajo el sol», dijo.

Al respecto, EEUU advirtió sobre las «serias consecuencias» que enfrentarán quienes intenten dañar a Guaidó, al tiempo que tildó de «amenazas ilegítimas» la petición de Tarek Saab.

Además, Departamento de Estado de EEUU recomendó a sus ciudadanos no viajar al país caribeño «debido a la criminalidad, el malestar social, una pobre infraestructura de salud» y a la posibilidad de «detenciones arbitrarias».

Según datos de la ONU, 43 personas han muerto y centenares han sido detenidas esta última semana en las protestas antigubernamentales.GARA