Euskal Herria ya sabe lo que es acoger etapas del Tour. Por ejemplo, la carrera dio sus primeras pedaladas de la edición del 92 en Donostia, donde se disputaron las dos primeras etapas –de las que la primera fue una prólogo ganada por Indurain– y partió la tercera.
En el 96, el Tour dedicó una etapa homenaje al pentacampeón navarro organizando una llegada en Iruñea, donde se impuso el suizo Laurent Dufaux. Más reciéntemente, la contrarreloj de la penúltima jornada de la edición del año pasado se disputó entre Senpere y Ezpeleta.
Ayer, lunes, el lehendakari de la CAV, Iñigo Urkullu, y el presidente de la Mancomunidad de Iparralde, Jean-René Etchegaray, se reunieron en Ajuria Enea y abordaron las materias en las que ambas comunidades pueden colaborar, también en el ámbito deportivo.
En la rueda de prensa posterior al encuentro, Urkullu confirmó que trabajan en una salida del Tour en suelo vasco con una etapa compartida ente Hegoalde e Iparralde. También puso fecha a sus deseos: 2022.
El pasado 13 de febrero la Diputación de Bizkaia compartía un tuit en el que hacía un guiño al Tour. ¿Será este mensaje presagio de algo?
Kaixo @LeTour#Bizkaia zure zain dago! pic.twitter.com/jquTTPXtEE
— Bizkaia (@Bizkaia) 13 de febrero de 2019