«No estaríamos en un cambio que supusiera un giro a la derecha, de ninguna de las maneras», ha puntualizado la candidata de I-E a la Presidencia de Nafarroa, Marisa de Simón, quien se ha mostrado a favor de un cambio «abierto a la participación, en particular del PSN, pero sin ningún tipo de exclusión».

De esta forma se ha pronunciado en una rueda de prensa en la que ha detallado sus propuesta económicas acompañada por los candidatos al Parlamento navarro Carlos Guzmán y Txema Mauleón.

A las elecciones de mayo, la coalición acude «con confianza y determinación para revalidar el cambio por la izquierda» y con el convencimiento de que «lo conseguido no tiene vuelta atrás», es «irreversible» y por lo tanto afrontan las elecciones con «satisfacción».

Satisfacción por haber conseguido «más autogobierno, más equidad, más calidad democrática, más laicidad, más memoria histórica, más igualdad, más medio ambiente sostenible, más pluralidad, más libertad y más cohesión social», según De Simón, que ha añadido que se ha dejado «muy atrás la Navarra de la imposición que negaba nuestra pluralidad».

Respecto a sus propuestas en el ámbito económico ha detallado tres, la primera de ellas una reforma del impuesto de Sociedades que permita recaudar unos 300 millones de euros más.

Su propuesta pasa, entre otras cuestiones, por aumentar del 28 al 35 % el tipo impositivo en el Impuesto sobre Sociedades a las grandes empresas y luchar de forma decida contra el fraude y la elusión fiscal.

Además I-E se propone impulsar y apoyar el derecho de acceso al empleo sin discriminación y en este sentido plantea dotar de los recursos necesarios al Servicio Navarro de Empleo para aumentar la intermediación en el mercado de trabajo. Actualmente no llega a intermediar ni el 3 % de los contratos laborales privados realizados en Nafarroa, según han apuntado.

Su tercera propuesta consiste en la creación de una banca pública que garantice el acceso a los servicios financieros básicos de todos los navarros, que, después de las «terribles consecuencias» de la desaparición de Caja Navarra, «ponga límites al oligopolio bancario».

Por su parte, Mauléon ha cuestionado a la oposición a la que ha acusado de «faltar a la verdad» al afirmar que en esta legislatura se ha gastado «más para conseguir lo mismo o menos», lo que ha rebatido señalando que el Presupuesto de Nafarroa ha crecido en 500 millones de euros, de los que más de 300 se han destinado a sanidad, educación y derechos sociales.

En ese contexto ha señalado que UPN «está recorriendo la geografía navarra prometiendo inversiones, cuando su propuesta es volver con la guadaña social», puesto que, según ha indicado, «supondría recaudar 300 millones de euros menos». Mauleón ha pedido a los regionalistas que digan «en qué van a recortar».

Finalmente, Guzmán ha abogado por «un cambio plural» que «priorice la agenda social», la «cohesión social» y que apueste por «seguir manteniendo a la derecha lo más alejada posible de las instituciones».