Andoni Ortuzar, presidente del PNV; Iñigo Urkullu, lehendakari; Aitor Esteban, cabeza de lista al Congreso por Bizkaia; y Almudena Otaola y Maribel Vaquero, candidatas al Senado por Araba y Gipuzkoa respectivamente, han sido los encargados de clausurar la campaña del PNV. Un acto para el que esta vez no han elegido La Casilla sino el Arenal, donde se han reunido cientos de simpatizantes.
El mensaje repetido machaconamente, en toda la campaña y también hoy, ha sido que el PNV es quien garantiza la defensa de los intereses vascos. «Nuestros intereses empiezan y acaban aquí», ha arrancado Otaola. «Solo nos mueve Euskadi», ha añadido Vaquero. «Es necesaria una visión exclusivamente vasca en Madrid», ha seguido Esteban.«Quien piense en Euskadi, que nos vote, que vote a la casa de su aita y de su ama», ha concluido Ortuzar.
Para el que ha sido portavoz jeltzale en Madrid, Aitor Esteban –introducido en la tribuna como «el mejor orador, el que nos ha regalado momentos históricos en el Congreso»–, «los vascos saben que el PNV nunca les dará la espalda hasta ser libres».
Ante decenas de ikurriñas ondeando al viento, alentadas a ello por la presentadora del acto, Esteban ha afirmado que el PNV lleva años siendo la gota de agua que va «agujereando insistentemente la roca de Madrid».
Ortuzar: «Teníamos miedo»
Andoni Ortuzar ha comenzado con una confesión: «No sabéis el miedo que teníamos a esta campaña, todo nos venía a contrapié: las vacaciones, la polarización con el trío de Colón, la ebullición en los batzokis centrada en la siguiente campaña... Pasamos unos días de acongojo, por no decirlo de otra forma cambiando las letras, pero las dudas se nos despejaron enseguida cuando vimos que estábais allí. Vosotros sois nuestra poción mágica».
Ha augurado unos buenos resultados este domingo, pero ha añadido que «la poción mágica la necesitaremos también después del domingo, no solo por las elecciones que vienen, sino porque la política española pinta mal, el sur está revuelto».
Seguidor fiel de las historietas de Astérix y Obélix, Ortuzar ha usado a estos personajes como hilo conductor de su discurso. De la campaña ha dicho que «están locos estos romanos», en alusión a todas las fuerzas españolas, y ha añadido que «no vamos a dejar que caiga sobre nuestras cabezas el cielo del autogobierno. No les vamos a dejar. Para eso os pido el último esfuerzo: indeciso o indecisa que conozcáis, pedidle el voto para el PNV, es el voto seguro, el voto vasco». «¡Aldea vasca irreductible!», ha concluido.
Al contrario que al inicio de campaña, en este acto final jeltzale no hubo críticas a EH Bildu, sino que todos los mensajes descalificatorios se dedicaron a los partidos estatales, incluido Unidas Podemos. Ortuzar ha puesto número a sus objetivos este domingo: seis diputados y ocho senadores.