Durante un acto electoral, Ruiz ha abogado por un sistema público de pensiones al considerarlas «un elemento clave para reconocer la dignidad de las personas y para la prevención de la pobreza».

«Nos planteamos por qué gran parte de las políticas sociales se financian por medio de los presupuestos y las pensiones son las únicas que en estos momentos se deben autofinanciar», ha cuestionado, y ha propuesto «abrir un verdadero debate» sobre si «al menos una parte de las pensiones pueden ser financiadas mediante los presupuestos generales».

La candidata abertzale ha denunciado además que existen «intereses políticos y económicos en azuzar y agitar los fantasmas del miedo respecto a si la caja de las pensiones se va a acabar, para favorecer exclusivamente los intereses privados de los planes de pensiones».

Tras defender una «fiscalidad más justa que haga frente a las desigualdades en esta materia», Ruiz ha recordado que actualmente Madrid ostenta las competencias en este ámbito.

«Apostamos por que, mientas no podamos ejercer las competencias plenas en esta materia, hay que seguir avanzando en la complementación de las pensiones», ha dicho, y ha planteado realizar un diagnóstico «exhaustivo» de la situación y posteriormente elaborar un plan plurianual, de forma que «todo el mundo pueda tener una pensión digna» de al menos 1.080 euros.

«No renunciamos a que Navarra tenga su propio sistema de pensiones, creemos que hay que empezar por reivindicar y exigir la gestión económica de la Seguridad Social y posteriormente hay que aspirar a que podamos configurar un sistema propio de pensiones donde podamos decidir aquí cuál es el modelo de financiación», ha señalado.

Por todo ello, ha apelado al voto de los trabajadores y pensionistas «que quieren un presente y un futuro digno para todas las personas», al tiempo que se ha mostrado convencida de que la ciudadanía navarra «va a seguir confiando en el camino emprendido en 2015» y fuerzas del cambio tendrán «mayoría suficiente para revalidar ese camino».