Iñaki IRIONDO

Con lo de los pactos y los gobiernos, vayamos por partes

Estos días se acumulan los comentarios y análisis sobre pactos, alcaldías y constitución de gobiernos que mezclan los diferentes niveles institucionales como si todas las decisiones tuvieran que tomarse a la vez cuando, en realidad, entre unas y otras van a pasar semanas o quizá meses. Por lo tanto conviene no liarse mucho e ir por partes, partido a partido, como diría un entrenador.

Estos días se acumulan los comentarios y análisis sobre pactos, alcaldías y constitución de gobiernos que mezclan los diferentes niveles institucionales como si todas las decisiones tuvieran que tomarse a la vez cuando, en realidad, entre unas y otras van a pasar semanas o quizá meses. Por lo tanto conviene no liarse mucho e ir por partes, partido a partido, como diría un entrenador.

El primer hito es el de la elección de las alcaldías. Hasta ese día lo más probable es que los partidos no comiencen a tomar decisiones en serio sobre el siguiente paso. Para los partidos de ámbito estatal será determinante lo que ocurra en Madrid (también en la Comunidad, que elige Mesa el 11) y otras grandes capitales. No será igual si el trifachito se consuma al completo o si falla en algún lugar. Y dependerá también de dónde. Ni da lo mismo si PSOE y Ciudadanos encuentran algún sitio en el que matrimoniar. Dentro de Euskal Herria, de momento, el PSE dice que el pacto con el PNV, que todos damos por hecho, va a depender de que no se sientan minusvalorados y, por supuesto, de que Irun no se convierta en una excepción. Lo normal es que no pase nada, pero en 2015 un aleteo de mariposa en Andoain estuvo a punto de causar la catástrofe de que Javier Maroto repitiera como alcalde en Gasteiz.

Elegidas las alcaldías, con las amistades o enemistades entre partidos que provoque, pasamos al siguiente escalón. Pero ahí tenemos un problema: no sabemos si se va a producir primero el debate de investidura de Pedro Sánchez como presidente del Gobierno español, o, por ejemplo, la elección de la presidencia de la Diputación Foral de Nafarroa. Y el orden de estos factores puede alterar el producto final.

Se especula con que el intento de investidura de Sánchez se celebrará en la primera o segunda semana de julio, porque en las semanas anteriores hay varios compromisos internacionales. Y se hacen sumas y restas con posicionamientos apriorísticos que nadie ha mencionado.

La constitución del Parlamento de Nafarroa será el 19 de junio. Luego la presidencia tendrá que hacer una ronda de contactos y ver si algún candidato o candidata tiene los apoyos necesarios. Cabría que el primer candidato fuera Javier Esparza o que, como Rajoy en 2015, pase palabra. En todo caso, lo de Nafarroa puede ir después de que Pedro Sánchez esté ya reinstalado en la Moncloa y, por tanto, sea mucho menos influenciable por lo que ladren la derecha y sus extremos.