«Repitiendo la dinámica de los últimos años, hoy los junteros de PNV y PSE volverán a unir sus votos para investir a Ramiro González, y harán un reparto de departamentos. Que nosotros sepamos es lo único que incluye su acuerdo, un mero reparto de de carteras», ha señalado el candidato de EH Bildu a diputado general, Kike Fernández de Pinedo, que ha advertido de que las elecciones del 26 de mayo dan pie a otras mayorías alternativas.

En este sentido, ha destacado que hay 29 junteros que apoyan el derecho a decidir, 33 favorables a un nuevo estatus político, y 26 partidarios de impulsar políticas progresistas. «Pueden construirse otras mayorías en esta Cámara aparte del acuerdo que firmen PNV y PSE. Araba se lo merece y trabajaremos en ello desde el primer día», ha aseverado antes de presentar las propuestas soberanistas.

Ha hecho hincapié en la necesidad de garantizar una recaudación «justa y suficiente, donde quienes más tienen más aporten». Así, ha propuesto plantear el Impuesto de Patrimonio en el IRPF, y crear un Impuesto de Grandes Fortunas, «que supondrían unos ingresos anuales para las arcas forales en torno a los 25 millones de euros». Además, ha reclamado cambios en el Impuesto de Sociedades, «con un planteamiento de progresividad en tres tramos y una base imponible igual a la de los países europeo más avanzados».

Asimismo, ha defendido un complemento de pensiones, hasta los 1.080 euros, y ha reivindicado medidas para «dignificar las condiciones laborales de los servicios sociales, mayoritariamente feminizado y sometido a una gran precariedad». «Para ello, el Gobierno foral debe, entre otras cuestiones, finalizar las OPE en marcha de manera urgente y mantener una actividad proactiva en lo referente a las principales reivindicaciones sindicales del sector, empezando por la inaplazable necesidad de que el sector de la residencias privadas se dote de un convenio colectivo», ha añadido.

Y ha propuesto la implementación del programa Errotuz, «que además de reducir los niveles de residecialización, avance en otro planteamiento, en un programa preventivo de atención a personas con necesidades sociales y basado en el envejecimiento activo que transforme el sistema actual y fomente la vida autónoma e independiente en el entorno natural de las personas».

También ha mostrado un rechazo al paso del TAV por Lauta y Valles Alaveses; ha criticado el embalse de Barrón; y ha propuesto una estrategia agroalimentaria para lograr que en para el año 2040 Araba consiga a autosuficiencia alimentaria, «es decir que en torno a un 75% de los alimentos sean locales y saludables».

En el tramo final de su intervención, ha saludado la nueva realidad institucional que se ha dado en Trebiñu y Argantzun, y ha defendido el derecho a decidir de la ciudadanía alavesa. En el ámbito de la paz y la convivencia ha insistido en que, «desde una lectura autocrítica y empática de lo ocurrido, se deben garantizar la verdad, la justicia y la reparación para todas las víctimas, in exclusiones ni categorizaciones». Y ha reclamado que se deroguen las medidas de excepción impuestas a los y las represaliadas vascas.

Por último, ha indicado que los junteros de EH Bildu «creemos en una gobernanza distinta, de abajo a arriba, que respete, escuche y permita que la gobernanza se construya desde odas las entidades del territorio, y con la participación real de las personas, agentes, colectivos y asociaciones alavesas».