El preso de Santutxu Garikoitz Aspiazu llegó ayer a la cárcel occitana de Lannemezan, distante en menos de 200 kilómetros de Baiona, según informó Etxerat. Condenado a penas que suman 28 años en el Estado francés, donde fue detenido en 2008, y a 377 años en el Estado español, Aspiazu cumplía condena hasta la fecha en la prisión de Arles, sita a 589 kilómetros de la capital labortana.

El de Aspiazu, presentado cuando fue detenido como responsable del «aparato militar» de ETA, se suma al acercamiento, en mayo pasado, de Mikel Karrera –condenado a dos cadenas perpetuas por la Justicia francesa– también a la cárcel de Lannemezan.

Cabe recordar que hace siete meses, en declaraciones al semanario “Mediabask”, la «segunda» del Ministerio de Justicia galo, Hélène Davo, situó el bloqueo del diálogo con la delegación vasca en «la dificultad» que implicaba acercar a militantes de ETA «con historial», citando a Karrera y Aspiazu.

Un fallo judicial avaló el traslado, por motivos familiares y de contexto, de Karrera, y ahora llega el de Aspiazu, cuya compañera e hijo de corta edad sufrieron un accidente de tráfico, el primero producido en 2019 según el balance de Etxerat.

El acercamiento de Karrera a Lannemezan se produjo cuatro días después de que el presidente francés, Emmanuel Macron, de visita en Biarritz, elogiara los avances logrados en el espacio de diálogo abierto entre la delegación que encabeza el presidente de la Mancomunidad Vasca, Jean-René Etchegaray, y el Ministerio de Justicia que dirige Nicole Belloubet.

Mientras, el traslado de Aspiazu llega en un momento calificado de «grave» por los representantes vascos, ya que el viernes la Fiscalía –dependiente del Ministerio de Justicia– recurrió la decisión de excarcelar al preso de Senpere Xistor Haranburu, que ha cumplido ya 29 años de prisión, adoptada por el tribunal de aplicación de penas.

Tras el acercamiento de Aspiazu son ya 13 los presos vascos que cumplen condena en Lannemezan, a los que se suman los otros 12 ingresados en la prisión landesa de Mont-de-Marsan, la más cercana a Baiona.