Han pasado siete ediciones desde que Pinot debutó en el Tour con un décimo puesto con 22 años y cinco desde que acabó tercero y su rueda de prensa de ayer demostró que ha superado los problemas psicológicos que le han acompañado desde entonces, como su miedo en las bajadas o la dificultad para superar la presión. Ya el año pasado renunció al Tour y fue tercero en el Giro hasta que enfermó el penúltimo día, ganó dos etapas en la Vuelta en Lagos y Naturlandia y acabó sexto y además venció en Milán Torino y Lombardía.

Ivon Madiot destacaba que «la evolución de Thibaut no es de meses. Ha logrado victorias muy importantes y fue determinante ganar en Lombardía. La prensa decía que fallaba en lo mental y es justo lo contrario. Cada vez que tiene un golpe duro se recupera y vuelve mucho más fuerte. Tiene mejor mentalidad y capacidad de análisis y ganar en Lombardia en una carrera con la que soñaba desde hace tiempo a un rival que admira como Nibali le ha dado mucha confianza para trabajar en invierno. Ha tenido un largo período de descanso de dos meses sin competición y eso ayuda a su frescura actual».

Le preguntaron si el maillot amarillo es una palabra tabú y Madiot respondió que «seguimos la línea marcada desde el inicio. El maillot no vendrá solo. La única palabra que trasmitimos es serenidad. Todos trabajamos para que Thibaut tenga confianza. Estamos muy orgullosos de lo vivido en el Tourmalet pero no hacemos grandes declaraciones. Estamos en la serenidad», repetía.

«Pueden pasar muchas cosas»

La serenidad que trasmitía ayer el propio Pinot al declarar que «no me siento el favorito. Esto va muy rápido. Los dos últimos días he sido el más fuerte y estoy contento, pero la carrera dura hasta el domingo y pueden pasar muchas cosas». Dijo que este Tour «corría muy bien antes del abanico y tras perder ese tiempo tenía la rabia de ganar en el Tourmalet. No tengo miedo, quería ganar el sábado y lo hice y ahora pienso en la general, es mi objetivo. Mi idea es atacar sin cálculos. Hay equipos menos fuertes que otros años y por eso es más bonito. Se verá el sábado en Val Thorens. No pienso en eso, he hecho tercero, voy cuarto ahora y sé que un día todo puede llegar. Me ha pasado tantas veces que no tengo ganas de soñar».

No le preocupa el calor ni el riesgo de viento que se espera hoy, aunque no le gustan, y no le preocupa no haberse entrenado en altitud cuando esperan cinco puertos por encima de los 2.000 metros: «Hay corredores que se han preparado en altura y ya no optan a la clasificación y gané en Suiza a 2.600 metros». Desvelaba que está al mismo nivel del año pasado en Lombardía y en la Vuelta: «Los indicadores de potencia dicen que tengo los mismos datos y a ver si consigo mantenerlos hasta el final del Tour».

José Luis Arrieta preguntó a madiot por qué no siguió Pinot a Landa

Mikel Landa se lamentaba en su rueda de prensa porque Pinot no le siguiera cuando atacó en el Mur de Péguère e Ivon Madiot desvelaba a GARA que el director del Movistar José Luis Arrieta le ha preguntado «por qué no siguió Thibaut y le dije que hay que poder. Sobre el papel es fácil, pero la rampa era muy dura y Landa es más fuerte en esas rampas duras y cortas de más pendiente. Sabemos que Landa va a atacar, no tiene otra opción y para nosotros puede ser interesante. Thibaut es un atacante, necesita que haya pelea para poder esforzarse, dar su máximo nivel y llegar al 100%».

Le preguntamos si sienten que es el más fuerte y está ante su oportunidad y dijo que no puede «responder a esa cuestión. Ha ganado etapas, ha sido tercero y por ahora es cuarto. Es el año que puede hacer grandes cosas. Está muy tranquilo, ya ha logrado grandes éxitos, tiene 29 años y llega a los buenos años de su carrera».J.I.