La idea de los firmantes del acuerdo de investidura de María Chivite es que la investidura se resuelva esta misma semana. Como la sesión durará dos días, su intención es convocar para el miércoles o el jueves como tarde. Existe cierta incertidumbre al respecto porque estas formaciones no tienen mayoría en el Pleno y tampoco en la Mesa. El órgano rector del Parlamento tiene cinco miembros, dos de los cuales pertenecen a UPN y otro a EH Bildu. Y también, por cumplir las formas. Se supone que el PSN no tendrá una decisión tomada hasta esta tarde, que es cuando el plan de Chivite se presenta para ser refrendado por las bases.
La cabeza de lista del PSN cuenta con salir elegida presidenta en la segunda votación, donde bastan más síes que noes. Su acuerdo ha conseguido atar los votos favorables de Geroa Bai, Podemos e I-E. En total, suman 23. Se da por hecho que los 20 de Navarra Suma votarán en contra. En consecuencia, el voto de EH Bildu será determinante. Si la coalición se abstiene (ya ha dicho que no dará su voto favorable), Chivite puede obtener el aval del parlamento antes de que finalice la semana. Si EH Bildu vota igual que Navarra Suma, el resultado final sería 23 síes frente a 27 noes.
En caso de que se llegara a una investidura fallida, habría de convocarse otra sesión antes del 26 de agosto, momento en el que el Parlamento quedaría automáticamente disuelto al vencer el plazo de tres meses desde la celebración de las elecciones. No hay límite sobre cuántas sesiones de investidura se pueden celebrar.