Ruiz ha comenzado su intervención recordando que hace ocho años participó en la investidura de Yolanda Barcina, a quien apoyaban UPN y PSN. «Hay cosas que han cambiado y otras que no tanto».

En este sentido, ha destacado que hace años también se puso en cuestión la legitimidad de la presencia de Bildu en la Cámara navarra, pero que pese a ello pudieron ser la voz de miles de ciudadanos navarros. «Ocho años después, tenemos el mismo planteamiento soberanista y de izquierdas», ha subrayado, al tiempo que ha incidido en la vigencia y la pluraldad del proyecto de EH Bildu en Nafarroa. «Eso es lo que les preocupa a muchos, que somos un agente imprescindible en Navarra», ha proclamado. Ha recordado que hace ocho años, Barcina dijo que la presencia de Bildu hacía más compleja la política navarra. «Hoy muchos sectores siguen igual», ha destacado.

«No se puede hacer una alternativa a la derecha en Navarra sin contar con EH Bildu. María Chivite ha vivido en la política-ficción. Hoy ha estado más realista», ha señalado.

Ruiz ha recordado que el acuerdo programático de hace cuatro años era amplio, incluyente, constructivo y con aspiración de ser sólido y duradero. Ha puesto en valor que Chivite haya apostado hoy por el diálogo, «pero lo que vale son los hechos, no las palabras. No repita la palabra ‘confianza’, se la tiene que ganar».

«Cualquier iniciativa la van a tener que hablar. Si no, no saldrá. Vamos a estar en una oposición contundentes cuando haga falta y constructiva cuando sea posible», ha señalado Ruiz.

Ha confirmado que mañana ofrecerán las abstenciones necesarias, una postura que responde a la estrategia de evitar la recomposición del Régimen, «que no es solo un partido, sino una red de poder».

«Sabemos dónde está el PSN. Históricamente ha obedecido a otros poder, no a los de la ciudadanía. Somos conscientes de ello, pero con esta decisión hemos cerrado la puerta a la esperanza de que UPN pueda volver al poder. Cuanto más tiempo esté la derecha fuera del poder, más débil será», ha explicado.

Ha señalado que el objetivo de EH Bildu era reforzar el Cambio iniciado la pasada legislatura, pero que los resultados no lo han permitido. En la nueva situación, ha señalado que hay opciones, pocas, para poder avanzar. «Pero no toleraremos ni un paso atrás», ha proclamado.

En este sentido, ha señalado que poner líneas rojas y negarse a hablar con fuerzas políticas supone perder credibilidad en la sociedad navarra.

Ruiz ha reconocido que el PSN se lo ha puesto difícil para poder permitir que gobierne, pero ha valorado que el 75% de los participantes en la consulta entre sus militantes haya optado por la abstención, «que no es un sí a su partido, está muy meditado».

Ha añadido que tienen en cuenta también al 25% que se ha manifestado por el no y ha recordado que las últimas veces que el PSN gobernó en Nafarroa fue con Gabriel Urralburu y Javier Otano, dos presidentes marcados por la corrupción.

La portavoz de EH Bildu no ha obviado la actitud mantenida por el PSN en la constitución de los ayuntamientos, dando vía libre a la derecha y arrebatando a EH Bildu alcaldías como Uharte o Sartaguda. «Nuestra abstención también tiene en cuenta esta actitud», ha subrayado.

«Algunos querían que les dijéramos que no. Eramos la excusa perfecta», ha indicado. «Pero somos la llave, una llave que puede abrir pero que también cerrar puertas».