23 personas han fallecido, 16 están desaparecidas y cerca de 150 han resultado además heridas a lo largo de todo el archipiélago, según las cifras de los cuerpos de rescate y autoridades locales recabadas por los medios japoneses.
La cadena pública NHK ha difundido desde primera hora de este domingo imágenes de áreas residenciales inundadas por desbordamientos fluviales y de las labores de rescate.
En la prefectura de Nagano, una de las más afectadas, las lluvias torrenciales han provocado el desbordamiento del río Chikuma, que fluye a través de la región, afectando a varias localidades situadas junto a él y arrastrando vehículos. Tres personas han sido rescatadas en incidentes de esta índole, pero otras tres siguen desaparecidas.
En la localidad de Sano, en Tochigi, el desbordamiento del río Akiyama ha inundado una zona residencial y los equipos de rescate están inmersos en el desalojo de las viviendas.
El tifón se ha debilitado tras su paso por el territorio japonés y a mediodía de ayer fue degradado a la categoría de ciclón extratropical.