Es posible que Velimir Perasovic se haya alegrado el triple que el resto de la gente reunida en el Buesa Arena. Después de cuatro derrotas consecutivas, Kirolbet Baskonia ha sabido remontar en el último cuarto ante un Betis que ha dominado claramente durante 30 minutos. Pero cuando Perasovic ha encontrado su quinteto ideal con Pierria Henry –desatado en el triple y en defensa– , Tornike Shengelia y Achille Polonara, ha llegado la voltereta. Un parcial de 32-14 que ha salvado el pellejo a Kirolbet Baskonia y quién sabe si a su entrenador.
El arranque baskonista ha sido inquietante a todas luces. Perasovic ha vuelto a probar con Stauskas de titular, pero el canadiense sigue reñido con el acierto, al tiempo que el Betis ha hallado a Whittington como principal arma, al ser el autor de sus siete primeros puntos. Los hispalenses han propuesto un juego de cinco jugadores abiertos para buscar bien el tiro o bien la penetración ante un Baskonia poco tenso en defensa y desacertado en ataque, al punto de que ha precisado seis intentos triples, sin buscar apenas balones al poste, para encestar uno. Micheal Eric, por su parte, ha continuado con su particular crisis existencial, tanto a la hora de defender a Whittington como para fallar en su productividad ofensivas con continuidad. Total, que con dos personales ha tenido que irse al banquillo.
Lo cierto es que el Betis ha salido mucho mejor, sabiendo cómo y dónde hacer daño en cada momento al Baskonia. Tanto es así, que Velimir Perasovic ha agotado dos tiempos muertos en el primer cuarto, después de verse superado con 9-18 en el luminoso. Por fin a la segunda ha resultado el respiro, sobre todo gracias a la entrada de Vildoza, minimizando daños al terminar el primer cuarto con 13-18 y, sobre todo, elevando un punto la intensidad en defensa y la claridad de ideas en ataque. En el caso de Henry, ha notado en exceso que sus rivales lo han flotado descaradamente, concediéndole el tiro exterior a cambio de cortar la opción de penetración y la combinación con sus compañeros.
Contemplando la primera mitad, el 34-35 con el que ha terminado ha sido una bendición. Y es que el conjunto sevillano ha amagado con romper el partido con la entrada del ex de Bilbao Basket Tobias Borg y Albert Oliver, obteniendo una renta máxima de 11 puntos con el 23-34. Un nuevo tiempo muerto, pero sobre todo el regreso de Shields y Pierria Henry a la cancha ha resultado providencial para la remontada gasteiztarra, un parcial de 11-1 cimentado sobre todo en la defensa, ya que los de Perasovic han puesto un punto más a su apuesta por el físico, al que los andaluces han notado, sobre todo veteranos como Oliver o Nacho Martín, a los cuales ya ciertos escalones físicos les quedan muy altos. Así es como Kirolbet Baskonia ha podido salvar el peor momento de un partido que, sin comerlo ni beberlo, se ha complicado en unos 20 primeros minutos como para reflexionar. sin tensión, este Baskonia no es amenaza contra casi nadie; si aprieta, la cosa varía.
Reacciones con respuesta
El arranque del tercer cuarto ha supuesto la primera ventaja del Baskonia, pero eso no ha significado cambio alguno en la dinámica del partido. Además, Pierria Henry ha pedido el cambio, visiblemente asfixiado, y la entrada de Vildoza no ha resultado bien. En buena medida, porque con el argentino el nivel defensivo se ha relajado un tanto, momento del que se ha aprovechado Whittington para castigar triple tras triple frente a un Micheal Eric que ha sufrido un calvario tratando de salir a puntear los tiros del pívot del Betis. Y con ello, con 46-51 en el marcador, Perasovic ha tenido que pedir tiempo muerto. Para más inri, la jugada siguiente del tiempo muerto ha sido una falta en ataque de Ilimane Diop y un triple de Enechionyia.
Tras el 46-54, Tornike Shengelia ha tomado el toro por los cuernos, liderando el juego del Baskonia y asociándose a la perfección con Vildoza, arrimando así el marcador a un 51-54 más esperanzador. Claro que el Albert Oliver, a sus 41 años, le ha respondido con un exactamente igual parcial de 0-5, dejando el partido con un peligroso 52-59 –Youssoupha Fall ha añadido un tiro libre al bagaje gasteiztarra– y a los 8.126 espectadores que han acudido al Buesa Arena con un moscardón tremendo tras la oreja.
El exitoso doble o nada
Perasovic ha hecho la apuesta por un dúo interior compuesto por Polonara y Shengelia –el georgiano jugando de pívot puro– en el inicio del último cuarto, y lo cierto es que le ha salido bien. Ambos interiores han sido los únicos anotadores del Baskonia en un parcial de 7-2 para dar inicio al acto final, obligando a Curro Segura a pedir tiempo muerto con 59-61 eb el luminoso.
Afortunadamente, este cambio de estructura ha dinamitado el partido. Primero, porque Kirolbet Baskonia ha encontrado los espacios que no ha tenido en los minutos anteriores. Segundo, porque los gasteiztarras han encontrado el acierto en el triple, de la mano de Pierria Henry, Polonara y Tornike Shengelia. Tercero, porque todo ello ha supuesto que el parcial del cuarto ha cambiado al fin el liderato en el partido, una suerte de apertura de la válvula de escape. Una rigurosa antideportiva pitada sobre Whittington ha supuesto, además, que Pierria Henry haya sumado cinco tantos más, dejando un 76-65 ya ilevantable para el cuadro bético, por mucho que KC Rivers haya puesto algo de picante con un lanzamiento lejano.
Pero con 76-68 en el luminoso a menos de tres minutos, los de Perasovic ya no se han dejado remontar. El Betis ha puesto una zona 3-2 de urgencia, pero Pierria Henry, ya lanzado, la ha roto con su enésimo triple, más un robo al posterior ataque andaluz. El Buesa Arena por fin ha respirado, gracias a un parcial de 32-14 que ha rescatado a los gasteiztarras, que han roto una racha de cuatro derrotas consecutivas, y quién sabe si el pellejo del propio Velimir Perasovic también acaba de salir del peligro.
Perasovic: «Cuando no anotas, te deprimes»
Más que satisfecho, Velimir Perasovic se ha encontrado aliviado por el triunfo de los suyos. «Teníamos que ganar sí o sí después de cuatro derrotas. Incluso partidos en los que hemos jugado bien los hemos perdido y necesitábamos esta victoria para creer en nosotros mismos», ha resumido el preparador baskonista.
«Hasta el último cuarto las cosas no nos iban bien, pero hemos encontrado el acierto en el último cuarto. Ellos querían jugar dejándole tirar a Henry y con un pívot que se abre y tira de tres. Hasta que hemos puesto a los dos ‘cuatros’ no hemos sabido resolver este problema», ha explicado el de Split.
«En los primeros cuartos no teníamos ni acierto ni decisión, y es que con tanto fallo el equipo se contagia. Cuando no anotas te deprimes y cometes errores en defensa, pero cuando empiezas a anotar todo parece que sale mejor», ha añadido Perasovic que, en ese sentido, ha tenido palabras de elogio para Pierria Henry. «Cuando al fin ha metido el primero, ha metido más, pero es que ha sumado 8 rebotes y 6 asistencias, y la clave es la energía que nos aporta. Por eso le he dicho que no dudara y que lance a la que tenga oportunidad»
Por otro lado, el preparador croata se ha mostrado preocupado por Vildoza, con problemas en el hombro, y Stauskas, «a años luz de su mejor nivel», según el entrenador. En cualquier caso, ha negado que «en principio» el club prepare algún fichaje. «Apostamos por ellos –Stauskas y Vildoza–; solo con Henry no podemos llegar», ha remachado.