El Athletic acaba con la mala racha de resultados con una victoria cómoda ante el Espanyol por 3-0. El triunfo se fraguó en los primeros veinte minutos con los dos goles de Muniain.

Garitano modificó el plan habitual otorgando más libertad a Muniain. El de la Txantrea pudo moverse por todo el frente de ataque tomando las riendas del equipo y prácticamente en el primer balón que tocaba, anotaba el primer gol en el minuto 4. La defensa del Espanyol no acertó a despejar dentro del área y Muniain estuvo atento para sacar el disparo.

Con Williams en banda derecha y Raúl García haciendo de 9, Muniain se erigió en el líder que necesita el equipo en el juego ofensivo. El capitán, lleva diez temporadas en el equipo, aunque solo tenga 26 años. Dos lesiones graves le han impedido tener continuidad, pero esta temporada le ha llegado el momento de dar un paso adelante.

El primer gol sirvió para dar tranquilidad a todo el equipo y confianza a un Muniain que en el minuto 17 se destapaba con un lanzamiento desde fuera del área al recoger un rechace en un córner. Pocas veces se le ha visto disparar desde lejos y dejó claro que puede y sabe hacerlo.

Después tuvo otra buena acción en ataque que Córdoba desaprovechó y recibió una pitada por parte de un sector de la afición. En otra jugada volvió a repetirse la situación.

El Espanyol apenas había aparecido, pero a la media hora se encontraba con una falta que Bernardo cabezeaba a la red. Por suerte para el Athletic, el gol fue anulado por fuera de juego. En vez de reaccionar, al conjunto rojiblanco le entró el miedo y los catalanes dispusieron de otra buena ocasión para anotar en una jugada de estrategia que Simón desbarató con un paradón.

La llegada del descanso le sirvió al Athletic para librarse de encajar un gol. El dominio del Espanyol fue menor al inicio de la segunda mitad, mantenía el control, pero sin inquietar a Simón.

En el Athletic Garitano tuvo que meter a San José por lesión de Unai López. El equipo reculó varios metros a la espera de cazar alguna contra como en una jugada bien comandada por Muniain que concluyó con un remate de Córdoba con la derecha. Al zurdo de Bilbo le falta acierto en el apartado ofensivo, pero nadie puede poner en duda el trabajo defensivo que hace.

Machín hizo dos cambios a falta de media hora metiendo a Ferreyra y Granero y poco después a Wu Lei. Sin embargo, el Espanyol no conseguía hacer daño a los rojiblancos y se encontró con el tercer gol en contra. Víctor Gómez enviaba el balón a las redes en una jugada rematada y provocada por Muniain. El capitán fue sustituido antes de acabar el partido y se llevó la ovación por parte de San Mamés.