El pleno del Ayuntamiento de Iruña Oka ha aprobado este viernes por unanimidad una declaración institucional en la que expresa su «más firme rechazo y condena a la agresión machista» sufrida por las tres mujeres durante el cotillón de Nochevieja y anuncia que se personará como acusación particular en el procedimiento judicial abierto para velar y defender a las tres vecinas.

Según ha confirmado la Ertzaintza, las tres mujeres denunciaron que el hombre, al que no conocían, las estaba molestando y señalaron que llegó a agredir a una de ellas. Según las denuncias presentadas por cada una de las mujeres, el hombre empezó a molestarlas y cuando le reprocharon su actitud se produjo un forcejeo, en el transcurso del cual el hombre llegó a propinar un puñetazo a una de ellas. 

Una patrulla de la Ertzaintza que se desplazó al lugar en el que se celebraba el cotillón identificó a las tres mujeres y a su presunto agresor, al que con posterioridad, una vez que las mujeres presentaron la correspondiente denuncia, imputaron un presunto delito de agresiones.

En una nota de prensa, el Consistorio indica que «si se confirma» que el presunto agresor pertenece «al cuerpo de funcionarios de prisiones» pedirán a la autoridad competente que se «depuren las correspondientes responsabilidades». También manifiesta que esta persona «no es bien recibida en el municipio y reclama su traslado».

Además, y tras remarcar su compromiso con la erradicación de todas formas de violencia machista, el Ayuntamiento insta a la ciudadanía a no ser cómplice y a posicionarse activamente mostrando tolerancia cero ante este tipo de actuaciones.

Finalmente muestra su solidaridad con las víctimas y convoca una concentración silenciosa este viernes a la que anima a la ciudadanía a sumarse.