El secretario general de ELA, Mitxel Lakuntza, ha afirmado que cuentan ya con la adhesión de más de 1.200 empresas a la huelga general convocada para el 30 de enero por la Carta de Derechos Sociales de Euskal Herria.

En una entrevista a Radio Euskadi, recogida por Europa Press, Lakuntza se ha mostrado convencido de que la jornada de huelga «va a ser muy importante», y ha apuntado que los convocantes harán pública esta semana el nivel de adhesiones a la huelga.

El secretario general de ELA ha afirmado que, en muchas empresas, entre ellas fábricas importantes como la de Mercedes-Benz, el apoyo del comité a la huelga ha sido «facilitado con las secciones sindicales de CCOO y UGT».

A este respecto, ha señalado que es «muy difícil» mantener una posición «en contra de los motivos de la huelga, en contra de que no se suban las pensiones, de que no se mejoren los salarios o de que se vaya contra la precariedad».

«No nos faltan razones», ha remarcado, y ha denunciado el aumento de precariedad y de la pobreza en la CAV, así como la desigualdad. Además, los salarios «han bajado diez puntos en los últimos años» y, en el caso de las pensiones, ha señalado que «no es un antojo de los pensionistas» salir a la calle a reivindicar una mejora.

Críticas a Podemos en la CAV

Ante la postura de Podemos en la CAV de no respaldar la huelga, Lakuntza ha afirmado que les «preocupa» esa posición, que es «hasta incoherente». Ha afirmado que el secretario general de esta formación, Lander Martínez, «ha venido a recoger algunos de los argumentos de CCOO y UGT para ir en contra de esta huelga».

A su juicio, Elkarrekin Podemos está «abandonado su parte más ligada a sus principios fundacionales y a su nacimiento». «Lo que observamos en el acuerdo presupuestario en el que solo han conseguido modificar un 0,75% del presupuesto (88 millones) es que están casi en un proceso de asimilación, donde el PNV y aquellos partidos más sistémicos están consiguiendo asimilar y que entren en código de lógica política», ha añadido.

Lakuntza ha asegurado que prefiere quedarse con las palabras del secretario general de Podemos y también vicepresidente del Gobierno, Pablo Iglesias, cuando al asumir su cargo animó a los movimientos sociales y sindicatos a «apretar» al Gobierno para «hacer más de lo que pensamos». «Me gustaría que Elkarrekin Podemos respaldase las palabras de su secretario general, que tienen mucho valor», ha manifestado.

Y ante las acusaciones de que se trata de una huelga política, ha manifestado que efectivamente es «una huelga política». « Claro que es política y nosotros queremos hacer política cuando estamos recogiendo ese tipo de reivindicaciones y queremos cambiar esas decisiones políticas y eso no es ningún secreto, somos los perjudicados de esas decisiones políticas», ha agregado.

Respuesta a Urkullu

Por otra parte, ante la decisión del lehendakari, Iñigo Urkullu, de no reunirse con ELA y LAB, ha destacado que el inquilino de Ajuria Enea «no dice la verdad» cuando les trasladar que «se tienen que dirigir a la ventanilla de Madrid» para estas reivindicaciones porque «su Gobierno no puede hacer nada para mejorar las condiciones laborales y de los pensionistas del país». «Me parece una tomadura de pelo», ha añadido.

Lakuntza ha recordado que se llevó una ILP al Parlamento vasco con la reivindicación de la pensión mínima de 1.080 euros y «los propios informes jurídicos del Parlamento dijeron que el Gobierno Vasco tiene competencias para mejorar y complementar las pensiones».

«Es un lehendakari que cada día está más alejado de una parte de esta sociedad, que es la que representamos los sindicatos mayoritarios y es un Lehendakari que no tiene ningún problema para hacer de portavoz de la patronal, lo hemos visto en el conflicto del Metal de Bizkaia», ha aseverado.