Representantes patronales y sindicales se han reunido esta tarde con varios consejeros de Lakua, como Arantxa Tapia (Desarrollo Económico), Pedro Azpiazu (Hacienda) y Sonia Pérez (Turismo). Entre ellos estaban organizaciones empresariales como Confebask, Adegi, Cebek y Sea o cámaras de comercio, además de los sindicatos UGT, ELA, LAB y CCOO.
El mensaje lanzado por Lakua ha sido de tranquilidad sobre el impacto económico del coronavirus, aunque matizando que «a día de hoy no existen datos objetivos para medirlo». Les ha dicho que se preparan para «un posible empeoramiento» y que «Euskadi dispone de unas cuentas saneadas» para responder a la crisis.
En este ámbito, ha trasladado que puede haber «financiación discrecional de los gastos del Departamento de Salud y rapidez en la respuesta de los estabilizadores automáticos en forma de prestaciones de la RGI y otras». También que «cabría formular líneas de financiación, reforzando las ordinarias e incluso emitiendo líneas extraordinarias puesto que se cuenta con margen en los límites de garantía que ya contempla la ley de presupuestos». Y añadiendo que en un escenario aún peor «se valorará orientar una parte sustancial del superavit de 2019 para la realización de inversiones que impulsen la actividad y potencien los efectos de respuesta a la baja de actividad».
Desde la parte empresarial, la principal preocupación ha sido «la gestión de los recursos humanos», ha dicho Lakua. En este sentido, se han analizado las medidas anunciadas por el Ministerio de Trabajo sobre cobertura ante regulaciones de empleo y alteraciones en la organización del trabajo.
ELA y LAB: «Osalan y Departamento, desaparecidos»
Por lo que respecta a los sindicatos, ELA y LAB han emitido una nota conjunta en la que afirman que el Gobierno de Lakua ha ido a la reunión «con las manos en los bolsillos» en lo que respecta a medidas en los centros de trabajo. Le ha acusado de «actuar de nuevo sin previsión, mal y tarde» ante un problema que «todos y todas veíamos venir, salvo el Gobierno Vasco».
Los dos sindicatos han puesto el acento en la necesidad de abordar la prevención en los centros de trabajo («Osalan y el Departamento están desaparecidos») y de afrontar también los efectos que pueda haber sobre el empleo en forma de EREs, ante lo que «el único esbozo de propuesta ha sido abrir la posibilidad de una línea de crédito para las empresas».