Trabajadores y trabajadoras de diversos centros del Igualatorio Médico Quirúrgico (IMQ) se han concentrado este mediodía ante las entradas de sus respectivos edificios en recuerdo a la auxiliar de enfermería que falleció el pasado sábado. Era vecina de Barakaldo y trabajaba en la clínica IMQ de Zorrotzaurre. En las protestas también se ha denunciado la escasez de medidas de protección.
El comité de empresa ha exigido «al grupo IMQ y a las direcciones de las clínicas IMQ Zorrotzaurre e IMQ Virgen Blanca que actúen con responsabilidad y garanticen la seguridad y protección de las trabajadoras, porque en la actualidad, las medidas de prevención y protección individualizadas son insuficientes».
Ha denunciado que veinte días después de decretarse el estado de alarma y atender a pacientes contagiados de COVID-19 derivados de Osakidetza no se han realizado todavía los test a todos los trabajadores, y recuerda que «las plantillas del sector sanitario estamos viviendo una situación límite, donde además de las cargas de trabajo que tenemos de manera ordinaria, ahora se añaden las psicológicas, y las que afectan a nuestra salud. Es por ello que exigimos al grupo IMQ que de manera urgente ponga los medios para garantizar la salud e integridad de todas las trabajadoras y trabajadores de las clínicas IMQ Zorrozaurre e IMQ Virgen Blanca, tanto para el personal propio del IMQ como para el personal de las subcontratas. Tanto del sector sanitario como de limpieza y demás servicios subcontratados».
El responsable de ELA en este sector, Ander Akarregi, ha reclamado al IMQ que «garantice la salud y la integridad» de todos sus trabajadores, incluidos los de las subcontratas, como era el caso de la auxiliar fallecida, que pertenecía a Gestlab.
Ha recalcado que es «obligación» de la empresa dotar de medidas de protección «adecuadas» a los trabajadores y ha recordado que hacer test en la plantilla es «indispensable» para aislar a los positivos y que no contagien a sus compañeros.
«Después de 20 días desde la declaración del estado de emergencia sanitaria no se han hecho todavía los test, y la plantilla vive un situación límite, cuando somos un sector esencial y de riesgo, y además, se han habilitado plantas para atender a pacientes contagiados de derivados de Osakidetza», ha criticado.