La serie cinematográfica ‘Loca academia de policía’ hizo furor entre los años 80 y 90, pero a su guionista difícilmente se le habrían ocurrido algunas de las cosas que se escuchan cada mañana en el Palacio de La Moncloa. Y menos aún intercalarlas, acapando protagonismo, en el terrible parte diario de fallecidos que enuncia Fernando Simón

Entran en acción entre el esperado parte de datos y las preguntas candentes sobre la evolución de la pandemia. Los Capitán Harris, Tackleberry y Proctor de la serie yanki se llaman hoy Miguel Angel Villarroya, jefe del Estado Mayor de la Defensa del Ejército español; José Manuel Santiago, general de la Guardia Civil; y en los últimos tiempos María Pilar Allué, comisaria principal de la Policía española.

Un mes de ruedas de prensa diarias (y las que quedan) da para cientos de perlas, pero una de las más aclamadas ha sido la reciente exaltación por parte de Santiago de la recuperación de 30 kilos de naranjas y limones que habían sido robados. «Gracias a Dios», remachó su narración.

El diputado de EH Bildu Jon Iñarritu lo reflejó en Twitter, pero es que dentro del instituto armado español también se ha lamentado en redes sociales la ridícula explicación y el tono empleado. Y hay quien ha reprochado a Santiago haber caído tan bajo después de haber pertenecido al Servicio de Información de la Guardia Civil en Gipuzkoa cuando ETA atentaba.

 Última Hora

Rueda de prensa Comité Técnico de la Crisis Sanitaria.

ℹ️ La @guardiacivil recupera 30 kilos de naranjas y limones que habían sido sustraídos y, gracias a Dios, los devuelve a sus dueños.

路‍♂️路‍♂️路‍♂️ pic.twitter.com/IeoQnnQv7R

— Jon Inarritu (@JonInarritu) April 14, 2020

Para Santiago, todo puntúa: de detenciones de borrachos a pequeños timos o delitos tecnológicos. Como el de un hacker ¡de 16 años! a cuya intercepción ha dado gran relieve este viernes la comisaria Allué, para matizar a continuación que el alcance de sus hackeos no se conoce todavía.

Toda redada que se precie necesita una buena etiqueta, y así llegamos a «los cuatro de Adios»: un grupo de personas que según la Guardia Civil se reunían por las tardes en la plaza de esta localidad navarra rompiendo el confinamiento y para cuya identificación ¡se utilizó un dron!

Tintes épicos se ha dado también al relato de la detención de un hombre en La Galleta (Santa Cruz de Tenerife) por tirarse al mar tras quebrar el confinamiento y esconderse en una cueva durante 24 horas. Acabó detenido, ¡la Policía no es tonta!

Esto tampoco se le ha escapado a la sagaz Guardia Civil: «Denunciado por pasear una oveja en Marbella durante el confinamiento». ¿Es eso delito? Hay que llegar a la letra pequeña para comprobar la realidad de la hazaña: no, pero como resultó que el animal no estaba vacunado como debía, también cabe en el parte.

Continuará.