La secretaria general de LAB, Garbiñe Aranburu, expuso ayer en una entrevista concedida a Herri Irratia cómo afronta el Primero de Mayo su sindicato. Confesó que será una cita totalmente atípica porque no podrán manifestarse «de forma normalizada», por lo que convocan caravanas de coches, ya que «es un día para salir a la calle».

Aranburu manifestó que el derecho de manifestación «no está suspendido» y criticó que en Nafarroa se haya prohibido la movilización prevista. Lo recurrirán porque consideran que es un «ataque contra la libertades políticas y sindicales».

Aseguró que, aunque las características de esta crisis son diferentes a las de 2008, «no es aventurado decir» que, si no se cambian las políticas neoliberales, las consecuencias seguirán recayendo en la clase trabajadora». La líder sindical indicó que «no lo van a permitir» y que ese es el «reto» que tienen por delante y el mensaje de su discurso este Primero de Mayo.

Ante la destrucción de empleo, la dirigente de LAB señaló que se evidencia que el modelo de relaciones laborales y productivo y el mercado laboral en el Estado español es «frágil» y se sustenta «en la precariedad laboral y social, en la temporalidad de los contratos». Ello ha hecho, a su juicio, que la destrucción de empleo haya sido «muy grande».

«Ventana a la oportunidad»

En este sentido, Aranburu apuntó que la previsión «no es buena» y ve «con preocupación el escenario que se avecina», pero también cree que puede suponer una «ventana a la oportunidad» porque los «dogmas» del modelo neoliberal están «cayendo» y hay que transitar a otro modelo que apueste por un «reparto más equitativo de la riqueza» y que lleve a revisar la actual política fiscal.

La secretaria general de LAB aseguró que el capital «se está preparando para la siguiente fase» y cree que los trabajadores también lo tendrán que hacer. Aranburu afirmó que ese tránsito a un nuevo modelo dependerá de la correlación de fuerzas y de la «capacidad de propuesta y lucha».

Tras recordar la huelga general de enero, señaló que hay que retomar la senda de la movilización y de la protesta porque «todo no está escrito» y dependerá «mucho de la capacidad de movilización y lucha». «Es el reto que tenemos de aquí en adelante», agregó.

Aranburu rechazó recurrir a la actual Mesa de Diálogo Social porque solo busca «legitimar las políticas patronales y gubernamentales» e indicó que es «antidemocrática» porque una «minoría sindical», en referencia a CCOO y UGT, «impone decisiones a una mayoría».

Aclaró que LAB no se opone al diálogo. Denunció que en esta crisis el Gobierno Urkullu «se ha quitado todas las caretas» y el «momento álgido de la simbiosis y del tándem PNV-Confebask» fue cuando el Ejecutivo español decretó el parón de las actividades no esenciales.

Aranburu afirmó que, cuando se estableció el estado de alarma que supuso una «recentralización, una usurpación de competencias y del autogobierno, se ha visto que el PNV entiende al autogobierno para defender los intereses de Confebask». «Y en muchos casos no ha estado claro si quien hablaba era Confebask o era alguien del Gobierno porque eran el mismo discurso y las mismas políticas», apuntó.

CCOO y UGT abogan por otro «modelo productivo y social»

CCOO y UGT en Hego Euskal Herria animaron ayer a manifestarse en las redes sociales con motivo del Primero de Mayo, en el que realizarán un sentido homenaje a las y los trabajadores que «están en primera línea» en la crisis sanitaria por el coronavirus y reivindicarán que es «inaplazable» impulsar «un nuevo modelo productivo y social».

Las dos organizaciones tanto en la CAV como en Nafarroa han consensuado un manifiesto bajo el lema «Lana eta zerbitzu publikoak: beharrezkoa da beste eredu social eta ekonomiko bat - Trabajo y servicios públicos: otro modelo social y económico es necesario». Una jornada que, según señalaron, se desarrollará «en medio del confinamiento motivado por el Covid-19, que está afectando a todo el mundo, aunque lo haga con diferente intensidad», y que ha puesto de manifiesto «la fragilidad e injusticia del modelo social y económico imperante».

Por ello, CCOO y UGT consideran que este 1 de Mayo «es la mejor ocasión para reivindicar un nuevo orden mundial más justo y solidario que sitúe a las personas y su bienestar, lo colectivo, por delante de los intereses económicos de unos pocos». GARA

ESK y Steilas exigen que se ponga la vida «en el centro»

Los sindicatos ESK y Steilas conmemorarán el Primero de Mayo con una campaña conjunta bajo el lema «Capital vs. vida» para reclamar que se ponga la vida de las personas «en el centro».

Ambas centrales estiman que es un «buen momento» para volver a reclamar «unos servicios públicos básicos universales». Afirmaron que servicios públicos como la sanidad, educación y cuidados «se han demostrado vitales» frente a la emergencia. GARA