Osakidetza comenzará «de manera paulatina» la vuelta a la actividad asistencial después de que haya «descendido el impacto de la epidemia por coronavirus». Asimismo, los hospitales vascos irán recuperando la actividad quirúrgica con la reapertura de más de 40 quirófanos la semana próxima, según ha informado la consejera de Salud, Nekane Murga.

«El plan de Osakidetza no es una hoja de ruta cerrada, ya que dependerá de la propia evolución de la pandemia y todos deberemos permanecer vigilantes. El coronavirus sigue estando entre nosotros», ha advertido, no obstante, la consejera en rueda de prensa.

Según ha valorado la responsable de Salud, la CAV se encuentra inmersa en una fase «de claro descenso del impacto de la pandemia» y ha valorado que las medidas difíciles adoptadas semanas atrás en los centros sanitarios «se han mostrado útiles», de tal forma que se puede decir, «con cautela, que las cosas están cambiando en la red asistencial».

Identificación, valoración, priorización

De este modo, según lo anunciado, tras la nueva situación y para recuperar la actividad asistencial, en las consultas externas de los hospitales se identificarán aquellas que hayan sido retrasadas y tras valorar su urgencia, se valorará si necesitan cita presencial o telefónica.

En primer lugar, irán las preferentes demoradas y posteriormente las ordinarias. De este modo, habrá una llamada telefónica previa a toda consulta presencial para detectar pacientes Covid-19.

En las pruebas complementarias diagnósticas se irán priorizando las pruebas realmente necesarias y se agruparán con las consultas para que el proceso sea más resolutivo.

Según lo detallado, en el caso de las analíticas, que suelen contar con «alta concentración de pacientes», contarán con una ampliación de horarios, adecuación de espacios y reorganización de circuitos internos.

Respecto a la programación quirúrgica, se «empieza a recuperar de manera progresiva» y a aquellas personas que se encuentran a la espera de una intervención quirúrgica o procedimiento invasivo, se les va a realizar una valoración telefónica de su estado de salud por parte del equipo médico que les trata, para determinar la urgencia y los plazos estimados.

Por último, en atención primaria tendrá un «papel fundamental» en la detección precoz y control de la epidemia, pero además, seguirá «priorizando» la atención telefónica e irá reintroduciendo progresivamente la atención presencial en los centros de salud.

En este sentido se tendrán en cuenta los grupos poblacionales con mayor riesgo y en estos se impulsará la visita domiciliaria. Asimismo, se trabajará para reducir aglomeraciones de pacientes y garantizar las distancias, y se retomarán para mediados de mes los programas de cribado y el calendario vacunal que se habían visto interrumpidos.

Apertura de quirófanos

La recuperación paulatina de la actividad permitirá que el Hospital Universitario Gurutzeta abra 18 quirófanos la próxima semana y ya ha habilitado seis unidades de hospitalización para pacientes no COVID con un total de 210 camas para pacientes médicos y quirúrgicos.

En el HUA Txagorritxu, a partir de la semana que viene estarán habilitados cuatro quirófanos para ir incorporando, además de las actuaciones indemorables, las operaciones preferentes.

En el caso del HUA Santiago, pasa de cinco quirófanos abiertos a seis la semana que viene y en el área de psiquiatría, vuelve al HUA la psiquiatría infanto-juvenil que estaba en Basurto y la de adultos que estaba en el Psiquiátrico de Araba.

Por su parte, el Hospital de Basurto tiene previsto abrir otros diez quirófanos para incrementar la actividad quirúrgica, mientras que Urduliz ya no cuenta desde este viernes con pacientes con COVID tras haber contado en su día con más de 105 pacientes con coronavirus.

Lo mismo sucede con los Hospitales de San Eloy y Arrasate. En este último la actividad quirúrgica está programada aproximadamente en un 60% esta semana y la próxima semana se incrementará hasta su capacidad habitual.

Por último, en la OSI Barrualde Galdakao están trabajando en medidas ligadas a la Atención Primaria, ampliando la sectorización de equipos con el fin de ampliar los circuitos de pacientes con y sin covid. La semana que viene volverá la psiquiatría y se habilitarán ocho quirófanos en el Hospital.

Posible rebrote

Cuestionada por los nuevos contagios, la responsable de Salud de Lakua ha afirmado que no hay datos que permitan asegurar que se está en la antesala de un rebrote, aunque sí se darán «dientes de sierra» en la evolución de la pandemia.

Asimismo, Nekane Murga ha recordado que en Osakidetza hay más de 35.000 profesionales en plantilla y ha detallado que, a fecha de 1 de mayo, se han realizado PCR a 18.993 profesionales y test rápidos a 19.335, aunque a algunos se les ha realizado ambas pruebas. De este modo, en el caso de PCR han dado positivos un 5,08% de los profesionales de la Sanidad en Araba, Bizkaia y Gipuzkoa.

También se ha desarrollado un estudio específico a aquellos profesionales que utilizaron las mascarillas defectuosas que fueron remitidas por el Ministerio de Sanidad (Garry Galaxy) hace varias semanas, alrededor de 4.000, de los que han tenido PCR positivo el 2,5%.

Respecto al lote de mascarillas KN95 retiradas en las últimas jornadas, Murga ha afirmado que ante los problemas habidos de materiales importados se decidió «llevar una política garantista para valorar los materiales». Por ello, se llevó a cabo «una cata» del material presente en los materiales para comprobar que eran equiparables a las conocidas FPP2, que cuentan con capacidad de filtrado superior al 94%.

«Hemos identificado que algunas sí cumplían esa capacidad de filtrado, pero había otras que no alcanzaban ese valor. Sin embargo, su capacidad de filtrado era en ocasiones superior a las mascarillas quirúrgicas», ha añadido.

De este modo, la consejera de Salud ha subrayado que en estos momentos en ningún área en la que se necesitan mascarillas con el más alto filtrado se encuentran estos materiales, aunque se realizará un seguimiento de los profesionales que en el pasado las hayan utilizado por áreas de mayor riesgo.

Campaña «2 metros, la distancia que nos une»

Por otro lado, el Departamento de Salud y Osakidetza han puesto en marcha una nueva campaña de sensibilización dirigida a la población. Nekane Murga ha recordado que «no debemos bajar la guardia» y que el futuro dependerá de cómo actuemos hoy.

Esta campaña, cuyo lema es «2 metros, la distancia que nos une», incide en la necesidad de mantener la distancia social, ya que esto evita que el virus se propague.

Asimismo, no se deben olvidar en ningún caso las medidas como la higiene de manos o no tocar superficies de contacto habitual, por ejemplo. Además, se recomienda el uso de mascarilla en aquellos lugares cerrados donde no sea posible mantener la distancia de seguridad. Por último, se recuerda que si una persona presenta síntomas debe aislarse y llamar al centro de salud.