Las ventas de cigarrillos en el Estado español se desplomaron un 26,37% en abril, en pleno confinamiento por la crisis sanitaria del covid-19, respecto al mismo mes de un año antes, lo que significa la mayor caída desde marzo de 2013, cuando se hundieron un 27%, tras las subidas de impuestos acometidas a principios de ese año.

En concreto, las ventas de cigarrillos se situaron en 136,27 millones de cajetillas en abril de este año, frente a los 185,07 millones de cajetillas comercializadas en el mismo mes de 2019, pese a que los estancos han permanecido abiertos desde el pasado 14 de marzo, fecha en la que se decretó el estado de alarma.

Gipuzkoa, con un 54% de retroceso en sus ventas, y Nafarroa, con un 50% de reducción, son, junto a Girona, con 62%, las zonas en las que el descenso ha sido más acusado. El cierre de las fronteras, donde los residentes al norte del Bidasoa, donde los impuestos al tabaco han sufrido grandes aumentos en los últimos tiempos, se ven incapacitados a acceder a zonas como Behobia y Dantxarinea, donde la mayoría de establecimientos o «ventas» están cerradas a falta de clientes, ha hecho que el descenso sea más acusado. El consumo en Araba y Bizkaia también ha sido importante, pero sin llegar, para nada a esas cifras.

De esta forma, en los cuatro primeros meses de 2020 la venta de cigarrillos acumula en el Estado español un retroceso del 5,9 %, respecto al mismo período del ejercicio anterior, hasta los 649,6 millones de cajetillas.

9.000 millones de euros al año para Hacienda

En esta misma línea, la recaudación fiscal por esta vía (sumando el IVA al impuesto especial que grava el tabaco) fue entre enero y abril de 2.328,3 millones de euros, un 6 % inferior a la de hace un año, según el Comisionado, organismo adscrito al Ministerio de Hacienda español. A través de estos impuestos, el Estado recauda anualmente en torno a 9.000 millones de euros.

Fuentes del sector consultadas por Europa Press han señalado que, pese al confinamiento, los consumidores han fumado menos ante la situación de incertidumbre económica derivada por la pandemia, el temor al desempleo y al hecho de que la Semana Santa cayó en abril este año y el anterior, en un contexto marcado además por el cierre de fronteras.

Pese al desplome interanual registrado en abril, la comercialización de cigarrillos acumulada hasta el cuarto mes del año no fue tan brusca, al descender un 5,87% y totalizar unas ventas de 649,59 millones de cajetillas, teniendo en cuenta que en marzo cayeron un 1,79% y en enero y febrero se anotaron subidas, con crecimientos del 2,76% y 4,28%, respectivamente, según los datos del Comisionado para el Mercado de Tabacos.

Tras once años de caídas en las ventas de cigarrillos, 2019 fue un año de estabilidad para el mercado, con unas ventas de 2.242,9 millones de cajetillas de 20 unidades, lo que se traduce en un avance del 0,53% respecto al ejercicio anterior. Desde 2008, año en el que se vendieron 4.514 millones de cajetillas, las ventas de cigarrillos se han reducido prácticamente a la mitad.

En este contexto, la previsible reducción en los volúmenes en los próximos meses, como consecuencia del aumento del desempleo y la mayor sensibilidad al precio de los fumadores, se traducirá en una caída de la recaudación, según apuntan las mismas fuentes, que señalan que dicha caída se producirá sin aumento del impuesto especial.

Según datos del Comisionado para el Mercado de Tabacos, entre enero y abril de este año Hacienda ha recaudado 2.665,8 millones de euros a través de los impuestos que gravan a la totalidad de las labores del tabaco, frente a los 2.793,6 millones de euros del mismo periodo de 2019.

En concreto, la recaudación por ventas de cigarrillos (impuestos especiales e IVA) se ha reducido un 6,09% en los cuatro primeros meses de este año, situándose en 2.328 millones de euros.

Cada vez menos fumadores en Hego Euskal Herria

Estos datos se han hecho públicos en vísperas de que el domingo la Organización Mundial de la Salud celebre su habitual Día Mundial sin Tabaco.

En esta ocasión, con su eslogan «Alcemos la voz», la OMS pone en el centro de su campaña a la industria tabaquera y sus manejos para conseguir nueva clientela entre adolescentes: sabores atractivos, emplazamiento de productos de tabaco en series y películas, presencia en redes sociales a través de influencers pagados…

Como recuerda la OMS, todos los años mueren como consecuencia de las enfermedades provocadas por el tabaquismo 8 millones de personas en todo el mundo. Para renovar su clientela, la industria gasta cada año 8.000 millones de dólares en marketing.

En su comparecencia de hoy, la consejera de Salud de Lakua, Nekane Murga, ha advertido que el consumo de tabaco «empeora» el diagnóstico de las personas que se contagian de covid-19, ya que los fumadores tienen un mayor riesgo de desarrollar «síntomas graves y de fallecer» a causa del coronavirus.

Osakidetza tiene registradas 93.629 personas como fumadoras y de ellas, el 56,6% son hombres. El grupo de edad donde se concentra el mayor número de personas consumidoras de tabaco es de 46 a 64 años. Hasta los 45 años apenas existen diferencias entre hombres y mujeres. Entre jóvenes de 16 a 25 años, el número de fumadoras supera el de fumadores, sin embargo a partir de los 46 años el predominio es masculino.

En cuanto a los tratamientos por tabaquismo que Osakidetza ofrece en todos sus centros de salud, la consejera ha informado de que se ha registrado un «ligero repunte» en la cifra de personas que han decidido participar. El pasado año, 2.742 personas acudieron a los programas de Osakidetza para tratamiento tanto individual como grupal.

El número de mujeres (1.469) es mayor que el de hombres (1.273), fundamentalmente porque las mujeres acuden con mayor frecuencia que los hombres a la terapia grupal. El grupo de mayor participación, tanto en hombres como en mujeres fue el de 46 a 64 años.

El porcentaje de personas fumadoras en Nafarroa ha descendido 12 puntos en las dos últimas décadas, al pasar de un 31,5% en 2000 al 19,5% actual, según la Encuesta de Condiciones de Vida de Navarra de 2017, última realizada.

Esta encuesta constata una prevalencia de consumo diario de tabaco del 19,5% de la población navarra mayor de 15 años (el 24,4% de los hombres y el 14,6% de las mujeres).

En el conjunto de la población, la prevalencia más alta se observa en el grupo de 35-49 años, con cifras superiores al 25%, y la proporción de exfumadores supera a la de fumadores a partir de los 50 años.

En todos los grupos de edad el consumo es mayor en hombres que en mujeres, y en los grupos de estratos sociales y niveles educativos menores.