Cualquiera que haya visitado el estadio Jean Dauger reconocerá que sí, que es entrañable y tiene una gran personalidad, pero que se ha quedado vetusto para lo que demanda un deporte profesional a estas alturas del siglo XXI.
Valga como ejemplo que los graderíos de los dos fondos se sostienen sobre un andamiaje metálico que a veces da la sensación de que puede venirse abajo en cualquier momento. Por no hablar de esos vestuarios ubicados en una caseta de obra o de esos urinarios masculinos que no son más que una pared al aire libre.
Hace ya unas semanas que comenzaron las obras, pero el Aviron Bayonnais ha publicado hoy un vídeo sobre cómo será el resultado final, coincidiendo con la rueda de prensa que han ofrecido el alcalde Jean-René Etchegaray y el presidente Philippe Tayeb.
En una primera fase, que se desarrollará hasta enero de 2021, se cambiará el césped, se construirá un nuevo graderío Este y se instalarán cuatro nuevas torres de iluminación.
En la segunda fase, hasta final de 2021, se levantará una nueva tribuna Sur, se construirá una zona de vestuarios y sala de prensa y se reformarán los exteriores, con nuevas zonas de restauración y otros servicios.
De forma paralela, el Ayuntamiento de Baiona dirigirá la construcción de un centro de formación y desarrollo que prestará servicio tanto al Aviron como al otro club de la ciudad, el ASB, que cuenta con una equipo en la élite femenina.
Etchegaray ha anunciado hoy además la construcción de una pasarela entre el centro de la ciudad y el estadio, a fin de evitar que los peatones tengan que seguir caminando por una zona con un intenso tráfico para llegar al campo.