El marcador pero sobre todo el juego desplegado por la Real en Abegondo ha confirmado las expectativas depositadas en el equipo txuriurdin. Al menos todo lo que puede hacerlo un primer partido. Tampoco será definitivo lo que suceda el sábado pero sí puede tener más valor, teniendo en cuenta que es el Levante el que visita Zubieta.

Natalia Arroyo cree que «este test tan difícil nos viene bien para medirnos» aunque recuerda que «en los distintos escenarios, sumes mucho o poco, jugando mejor o menos bien, van a quedar treinta jornadas después, nada va a ser definitivo». «Pero es cierto –añade– que es una oportunidad para confirmarnos en esta dirección que queremos estar. El grupo es ambicioso, está gustando lo que hacemos, y poder demostrarlo contra los que han estado por delante nuestro en temporadas anteriores da un punto de objetividad a esas sensaciones. Es una buena manera de medirnos», insiste.

Si sale mal «no será un desastre ni un globo que se pincha» y si sale bien tampoco habrá que lanzar las campanas al vuelo aunque es evidente que «vamos a estar más seguras», como ha sucedido esta última semana tras la victoria ante el Deportivo. «Las semanas son más sencillas si las sensaciones del fin de semana anterior son buenas. En Abegondo hicimos un partido muy bueno, sobre todo en una primera parte donde fuimos como queremos ser y en la que se notaron las ganas que tenemos de competir y poner en práctica las semanas que llevamos de trabajo. A partir de ahí, el mensaje es que queremos más y ser más exigentes porque hacerlo bien en un partido no te asegura hacerlo bien en el siguiente, aunque nos da confianza para seguir en esta línea».

Tanto le gustó el debut de su equipo a la entrenadora catalana que le cuesta señalar alguna carencia. «Me gustaron casi todas las cosas –confiesa– porque entendimos que los partidos siempre van a durar noventa minutos y no vamos a poder estar excelentes y acertadas durante los niventa. Tenemos que intentar alargar cuanto más mejor esa racha buena, esos 20-30-45 minutos que estuvimos bien, alargarlos mucho más. Aunque en la segunda parte también hubo cosas muy muy buenas, actuaciones individuales, comportamientos colectivos y recursos muy buenos que nos sirvieron y que algún día nos servirán como plan principal. Siempre voy a sacar cosas buenas porque las que no salen tan bien también es bueno saberlas».

Todas esas cosas buenas intentarán repetirlas las donostiarras en Zubieta. Arropadas por la afición, lo que supone «una pequeña alegría. Mejor 150 que nadie y además supongo que los que vengan, como nosotras, estarán con muchas ganas. Les vamos a necesitar todo el año, estar con ellos es un estímulo más». También lo es, en opinión de Arroyo, que esos seguidores y los que tendrán que vivir el partido desde casa, estén emocionados con las expectativas depositadas en esta Real.

«Me parece fantástico que la gente se enganche y se ilusione y que le haya gustado nuestro partido. Que la gente lo diga me parece más bueno que malo. Porque dentro estamos entendiendo que la manera de transmitir eso es currando y exigiéndonos, diciendo hicimos un buen partido pero tenemos que mejorar todavía. Como la mirada es esa, no me importa que el ambiente sea de expectativa alta o de presión. No lo siento de manera negativa, lo siento como un empujón hacia adelante. Y hay que aprovecharlo porque durante la temporada habrá momentos en los que no todo nos salga bien. Ojalá esa sensaciones se alarguen después de muchas más jornadas».

La técnica blanquiazul también se ha referido a sus primeras impresiones sobre una Liga en la que, incluso con «sólo mirar los resultados», ya se confirma que «esta Primera Iberdrola tiene pinta de ser supercompetida, de ser una demostración más de esa competitividad que hemos ido ganando, del nivel que han ido adquiriendo todos los equipos. Tenerife empatando con el Atlético y compitiendo hasta el final, el Eibar levantándole dos puntos al Levante, marcadores supercortos, visitantes puntuando… Sabíamos que esta Liga no iba a ser fácil y estas dos primeras jornadas van en esa línea. No te puedes fiar de ningún campo ni de ningún rival. Eso es bueno. Y va a ser divertido».

La entrenadora catalana, por otro lado, no ha descartado que Nahikari García, que ya está con el grupo, pueda entrar en la convocatoria, aunque pide «tranquilidad». «Es muy importante tenerle en el grupo y que se sienta bien pero no vamos a ir con más prisa de la que toca. Mañana veremos cómo estan todas. Tenemos ganas de tener a todas disponibles pero vamos a tener tranquilidad. La temporada es larga» ha recordado.