No hace falta gran cosa para poner de los nervios a la derecha española, pero este jueves ha despertado auténticamente enloquecida tras el anuncio de Arnaldo Otegi de que EH Bildu está dispuesta a votar sí a los presupuestos. Su furia va en doble dirección: contra el Gobierno Sánchez, que si se consuma este acuerdo consolidará su perfil de izquierda, y contra el independentismo de izquierda, que consideran que queda «blanqueado».
Tan mal le ha sentado la noticia al inefable Federico Jiménez Losantos, hoy venido a menos y seguramente necesitado de golpes de efecto, que ha iniciado su programa radiofónico encapuchado para recrear que Sánchez sacará adelante los presupuestos «con los herederos de ETA». Sin txapela, eso sí.
Los etarras al frente de los PGE. Así presenta este gobierno los presupuestos de todos los españoles: con los herederos de la ETA. @eslamananadeFJL pic.twitter.com/2iT0Lj7x3x
— Es La Mañana de FJL (@eslamananadeFJL) November 12, 2020
Este tuitero sí se ha acordado de las txapelas, por cierto, aunque sobre las cabezas de Pedro Sánchez y Pablo Iglesias al firmar su acuerdo de Gobierno de coalición.
Sánchez gobierna con 260 mil votos de BILDU.
— Agente Ferreras #SanchETA (@AgenteFerreras) November 12, 2020
Y @CiudadanosCs con un MILLON y MEDIO no pinta nada.
¿Recuperamos la democracia?#CambioLeyElectoral #ConBilduNoSeAcuerdaNADA pic.twitter.com/NbCszFXX38
‘El Mundo’, por contra, se ha ido al otro extremo: de lo grotesco a lo solemne. Para su titular de portada, el Gobierno español ha convertido a EH Bildu en «partido de Estado». ¿Quizás con una intencionalidad añadida de meter cizaña en el independentismo de izquierdas? Una «boutade» en cualquier caso.
En la edición digital, este diario refleja lo que realmente le hace daño de este acuerdo: ‘Pedro Sánchez premia a Bildu con las medidas estrella de su política laboral’, titula, para añadir a continuación que «el Gobierno concede a los abertzales cesiones en materia sociolaboral».
En la marabunta de reacciones, hasta ha vuelto a escena el exdirigente del PP Borja Sémper, que cambió la política por la empresa privada justo antes de la pandemia. Aunque se ha hecho un lío al mezclar a EH Bildu a Vox.
No deja de ser llamativo que con Vox, por ejemplo, no se puede ni hablar, pero con Bildu sí pactar cosas esenciales para el país.
— Borja Sémper (@bsemper) November 12, 2020
Y no establezco paralelismo alguno porque no existe: Vox son ursulinas en comparación con Bildu. Y no hace falta que entre en detalles.
Como insinuó Pablo Casado, líder del PP, el miércoles en el Congreso y recoge en su artículo de hoy en GARA Iñaki Iriondo, varios mensajes en las redes vinculan los avances hacia el acuerdo presupuestario con los tibios movimientos en política penitenciaria. Presos por presupuestos, ironiza este mensaje en Twitter:
Empezando por Bildu y Podemos. pic.twitter.com/DAbIASVlsD
— Políticamente Incorrecto (@Poltica85983726) November 12, 2020
Sobra decir que en España también hay quienes ven las cosas de otra manera y saludan este avance hacia un acuerdo de contenido social. Un ejemplo en las redes:
Bildu salvará a lxs trabajadorxs de España
— Michael#ciutatmorta (@almysha1) November 12, 2020
Se llama solidaridad internacionalista#PGE2021 #stopdispersioa pic.twitter.com/NoVWQQwYUi