El pasado 22 de setiembre se inauguró una instalación permanente de luz y sonido sobre la popular grúa, que todas las noches del fin de semana se ilumina de forma estática.
Ahora, a partir del viernes 1, se pone en marcha una nueva fase del proyecto ‘Carolaren Arima’, financiado por BBK y la Diputación Foral de Bizkaia.
Será un nuevo espectáculo dinámico, en una suerte de instalación artística, ejecutada por el equipo Elektrart y por personas de Itsasmuseum.
Esta pieza artístico-sonora de 12 minutos de duración ofrecerá un relato histórico, un viaje a través del oído por la historia de la grúa Carola y de los diques en los que se ubica.
Obra sonora
La obra sonora, que comienza y concluye con el evocador sonido del mar, reproduce sonidos de diferentes materiales y herramientas como la madera, las sierras, las lijas, garlopas y la soldadura, algunos grabados en los diques de Itsasmuseum, con el objetivo de trasmitir la evolución industrial en la zona.
Recoge el característico ruido del motor del gasolino, embarcación que utilizaba Carol Iglesias, la mujer que da nombre a la grúa, para acudir a su puesto de trabajo, y juega con la intensidad, tanto de la luz como del sonido, para representar la pérdida de intensidad en el trabajo de los astilleros Euskalduna.
Continúa con la lucha de los trabajadores de Euskalduna, reflejada con la fuerza de una guitarra eléctrica, para finalizar con un extracto de ópera, en una alusión a la transformación de la ciudad.