La cúpula del Departamento de Economía y Hacienda, encabezada por el consejero Pedro Azpiazu ha celebrado este viernes su primera reunión con el grupo parlamentario EH Bildu, liderado por su portavoz, Maddalen Iriarte, para hablar de los presupuestos de este 2021 que se aprobarán en el Parlamento el once de febrero.

Tras el encuentro, la consejería ha emitido un comunicado en el que deja claro cuál es el objetivo de esta ronda con la oposición y que el consejero ha destacado hoy al inicio del encuentro cuando ha «planteado la necesidad de que cada grupo político se posicione y decida si muestra una postura de apoyo al bienestar de la ciudadanía vasca y al desarrollo económico y recuperación del empleo de este país, a través del apoyo al presupuesto».

Esta demanda de adhesión al proyecto gubernamental coincide con una idea expresada por la portavoz de EH Bildu, Maddalen Iriarte, a la salida de la reunión, cuando ha afirmado que «nos han verbalizado que no necesitan de nadie que les apoye».

PNV y PSE tienen mayoría absoluta para la aprobación de las cuentas, aunque el Ejecutivo autonómico asegura que busca ampliar ese consenso. En el grupo de la izquierda independentista tienen claro que el Gabinete de Urkullu en ningún caso quiere lograr ningún acuerdo con ellos y la reunión, aunque «agradable» en las formas, ha confirmado esa sensación.

Por el Departamento de Economía y Hacienda han acudido al edificio de La Bolsa de Bilbo el consejero, Pedro Azpiazu, el viceconsejero Hernando Lacalle, el director de Presupuestos, Iñaki Garay, la directora de Gabinete, Yurdana Burgoa, y el asesor de normativa hacendística y financiera, Joseba Andoni Alcalde. La delegación de EH Bildu ha estado compuesta por la portavoz del grupo, Maddalen Iriarte, la coordinadora, Nerea Kortajarena, y el parlamentario Mikel Otero.

Negociación limitada

A la salida de la reunión, Iriarte ha mostrado ante los medios su decepción con la actitud del Gobierno que ha presentado una proyecto de presupuesto que no responde a la situación de excepcionalidad que se vive con la crisis y que, como hasta ahora, no tiene interés en dialogar con EH Bildu, que es el primer grupo de la oposición. Ha insistido en que, pese a ello, la formación de la izquierda independentista está trabajando en un plan integral que vaya más allá de los presupuestos y que probablemente presentarán la próxima semana.

En su nota, el Gobierno aclara que el consejero Pedro Azpiazu ha adelantado que la mesa de negociación del presupuesto abarca un marco económico-competencial claramente definido y que no se van a dar «cambios revolucionarios ni incuantificables».

En cualquier caso, el Departamento ha insistido en que EH Bildu no ha presentado en la cita ningún plan concreto y que el consejero «ha mostrado su interés por recibir en los próximos días la propuesta de este grupo político para poder analizar las cuestiones que planteen».

De todas formas, el Gobierno tiene claro que su proyecto de presupuestos «es ambicioso, el más potente con el que ha contado nunca el Gobierno Vasco, que permite encarar el año con la fuerza suficiente para hacer frente a la crisis económica y sanitaria generada por la pandemia, asentar el presente y mirar al futuro con certidumbre y estabilidad presupuestaria».

Pedro Azpiazu y su equipo se reunirán el lunes con Vox, el martes con PP+Cs y el miércoles con Elkarrekin Podemos-IU. El 19 acaba el plazo para la presentación de enmiendas.