Estaba previsto que las doce personas citadas declararan entre mañana y el jueves por vía telemática en el Palacio de Justicia de Nafarroa, delante del cual se había convocado una concentración de apoyo a esas personas y que contaba con la adhesión de más 50 de entidades. Sin embargo, ese trámite ha sido retrasado por la propia Audiencia Nacional a causa del temporal Filomena, por lo que la concentración ha sido suspendida.
Están acusadas de un delito contra la Corona española porque en el acto del 12 de octubre en Iruñea fueron derribadas sendas estatuas que representaban al rey español Felipe de Borbón y a Cristóbal Colón, y que terminaron por los suelos y sin cabeza.
Antes de conocerse ese retraso, un total de 56 entidades, entre partidos políticos, sindicatos y asociaciones, ya habían mostrado su adhesión a la concentración en apoyo a las doce personas citadas a declarar por la AN.
Han mostrado su apoyo a los citados a declarar los partidos políticos EH Bildu e Izquierda-Ezkerra, además de los sindicatos LAB, ESK, Steilas, EHNE, CGT y CNT Iruñea.
El resto son asociaciones de Nafarroa y de Iruñea, con representación de diversos barrios de la capital, como Arrotxapea, Alde Zaharra, Arrosadia, Azpilagaña, Antsoain y Txantrea. Entre ellas, se encuentran Bilgune Feminista, Sare, Zabaldi, San Fermines 78, Autobús de la Memoria, Iruñeko Peñen Federazioa, EHGAM Nafarroa o SOS Racismo Nafarroa, hasta alcanzar casi cincuenta.
Críticas de ELA y CCOO
Por su parte, el sindicato ELA ha hecho público un comunicado en el que pide que se archive este caso, al tiempo que «denuncia firmemente este ataque a la libertad de expresión», solicita «el cese de la persecución política» y muestra su «solidaridad con los y las procesadas».
La central reivindica «el carácter republicano y antimonárquico de Navarra. La monarquía es una institución arcaica, antidemocrática, machista y corrupta, con innumerables delitos, crímenes, irregularidades e irresponsabilidades cometidos al amparo de la inviolabilidad y de los principales medios de comunicación, de las fuerzas políticas, económicas y judiciales y de la iglesia católica española».
CCOO de Nafarroa también ha criticado el caso y califica la citación por la Audiencia Nacional de «desproporcionada». En un comunicado, señala que esta imputación «está fuera de lugar ya que derribar una estatua del rey y otra de Colón puede ser de mejor o peor gusto, pero se enmarca dentro de la libertad de expresión y de la crítica política».
A juicio de este sindicato, «el Tribunal de Derechos Humanos de Estrasburgo ya dictaminó que quemar fotos del rey se enmarca dentro de la libertad de expresión, por ello carece de sentido insistir en la vía punitiva y penal para dirimir este tipo de asuntos».
Manifestación de apoyo en Iruñea
Por el momento se mantiene para este sábado día 16 la manifestación convocada en Iruñea por Sortu con el objetivo de mostrar su apoyo a los citados a declarar y que partirá desde el parque de Antoniutti a las 17.30 horas.
En el comunicado en el que anunciaba la convocatoria de la manifestación, Sortu señalaba que la acusación de delito contra la Corona española es «un grave ataque a las libertades fundamentales» que viene a «confirmar lo que quisimos denunciar el 12 de octubre, que, a lo largo de la historia, el proyecto de España se ha construido sobre la opresión de pueblos y personas, sobre la imposición y la represión» y «así sigue siendo hoy en día».
En este sentido, afirmaba que «el Régimen que tiene como pilares fundamentales al Rey de España y la Constitución del 78 es una cárcel de pueblos que impone el proyecto de España y criminaliza y castiga reivindicaciones democráticas».
Sin embargo, añadía, «el Régimen del 78 está en crisis, en decadencia. Por eso los sectores más reaccionarios del Régimen arremeten con fuerza, tanto en España como en Navarra. Y utilizan todos los instrumentos que tienen al alcance, desde la Judicatura hasta las cloacas del Estado».
«Ha llegado la hora de tumbar el Régimen, de emprender el camino a la democracia y la libertad», concluía Sortu.
Sortu convocó el acto que tuvo lugar el pasado 12 de octubre en Iruñea para exaltar a los pueblos, denunciar «el carácter imperial del reino español» y recordar que el denominado Día de la Hispanidad «no hay nada que celebrar».
En el mismo participaron miembros de comunidades de diferentes países y durante su celebración fueron derribadas sendas figuras que representaban al rey español Felipe VI y Cristóbal Colón que habían sido colocadas ante el Palacio de Diputación. Al caer al suelo, las cabezas de las efigies se separaron del resto y rodaron por el suelo.