El Ejecutivo navarro y la FNMC mantendrán un encuentro este viernes para preparar las infraestructuras necesarias para acometer la próxima campaña de «vacunación masiva». Aunque el operativo depende de las dosis de vacuna disponibles en función de la distribución por parte de los laboratorios, el Gobierno espera que sea en el segundo trimestre del año cuando se produzca este significativo incremento.

El vicepresidente Javier Remírez ha especificado ante los medios que, garantizando siempre las segundas dosis, para la intensificación de la campaña de vacunación se habilitarán «todos los recursos e infraestructuras necesarias», punto en el que ha agradecido la disposición de las entidades locales, como ya han demostrado en los cribados realizados hasta el momento.

En cuanto a las siguientes etapas, Remírez ha indicado que ahora se está vacunando a personal sanitario de segundo nivel por riesgo de contagio, y los siguientes serán los mayores de 80 años y a continuación los de 70 a 79, alrededor de unas 90.000 personas.

Unas fases a partir de las cuales ha asegurado que habrá «una trazabilidad muy estricta» de las vacunas para que no haya problemas más allá de «algún desajuste», punto en el que ha indicado que al Gobierno «no le constan irregularidades» en la vacunación del Hospital San Juan de Dios. Este centro, ante las acusaciones de LAB en ese sentido, las ha negado.

El vicepresidente ha comentado que aún está sin concretar el proceso que se seguirá para llamar a vacunarse a las personas mayores y del que, una vez definido, el Gobierno dará información.

La desescalada debe esperar

Además ha agregado que también la próxima semana el Ejecutivo estudiará si a partir del 26 de febrero, antes no, flexibiliza las medias contra el covid, y al respecto, ha insistido en mantener una actitud de «prudencia», aunque los datos epidemiológicos ofrezcan una evolución «positiva».

En este sentido, ha subrayado que con una incidencia la semana pasada de 232 casos por cada cien mil habitantes, el riesgo es aún «alto», según el semáforo que mide la situación de los distintos territorios.

Por eso ha abogado por «consolidar» la tendencia a la baja, para lo que ha puesto en valor las distintas medidas adoptadas por el Gobierno navarro.

«Seguimos las recomendaciones» no solo de las autoridades sanitarias navarras, sino también de los expertos estatales y de la OMS, ha comentado, y recordado que en Europa se manejan cifras de incidencia inferiores a las del herrialde para desescalar.

Tras reafirmar que el objetivo es «que los pasos que se den sean para no volver atrás», lo que también es bueno para los negocios, ha recordado que en diciembre se decidió flexibilizar las restricciones con datos de incidencia mejores que los actuales.

Al respecto, ha remarcado el interés del Gobierno por que se pueda retomar la actividad, pero siempre que lo permita la salud publica, por lo que ha justificado que al menos hasta el próximo día 25 permanezca cerrado el interior de los establecimientos de hostelería. Un sector con el que el Gobierno se ha comprometido a articular nuevas medidas con una dotación de diez millones de euros que previsiblemente se den a conocer esta semana.

En la misma línea de prudencia, Javier Remírez ha destacado, al ser preguntado por Semana Santa y Sanfermines, que «la prioridad del Gobierno es seguir atendiendo la lucha contra la pandemia y el proceso de vacunación». «Esas son las prioridades y no otras», ha reafirmado.