Maite Ubiria

Estar vacunada no exime de cumplir las restricciones a la movilidad

Una mujer de 83 años de edad cursó una petición al Consejo de Estado para que las restricciones a la movilidad implementadas inicialmente en 19 departamentos franceses no se aplicaran a personas ya vacunadas. Esa instancia ha desestimando la demanda porque la vacuna no impide la difusión del virus.

Una sanitaria procede a vacunar a una persona en el vacunódromo de la Casa de las Asociaciones, en Baiona. (Guillaume FAUVEAU)
Una sanitaria procede a vacunar a una persona en el vacunódromo de la Casa de las Asociaciones, en Baiona. (Guillaume FAUVEAU)

El Consejo de Estado francés al que dirigió su petición una ciudadana francesa de 83 años de edad ha sido explícito a la hora de rechazar la demanda: las personas vacunadas contra la covid-19 pueden ser portadoras del virus y contribuir a su difusión, ya que la vacuna no impide el contagio, solo preserva a quienes se contagian a posteriori de desarrollar las formas graves de la enfermedad.

El 19 de marzo pasado el Gobierno francés decidió limitar la movilidad en 19 departamentos del Estado francés en los que la situación pandemia era más crítica.

Fue esa medida, que posteriormente dio paso a un tercer confinamiento en el conjunto del Hexágono, incluida Ipar Euskal Herria, la que llevó a esta persona a presentar su demanda.

La demandante, que reside en uno de esos departamentos inicialmente afectados por las restricciones, aseguró que, una vez vacunada, la aplicación de esas restricciones vulneraba su libertad de movimiento.

Solicitó así en su petición dirigida al presidente del Consejo de Estado la suspensión de esas limitaciones a toda persona que haya recibido la vacuna contra la covid-19.

Esta persona razonaba en su petición que medidas como el cierre perimetral, el toque de queda –que rige en la actualidad de las 19.00 a las 06.00 del día siguiente– y en general las medidas de confinamiento «no son necesarias ni se adaptan a la situación de las personas vacunadas».

Sin embargo, el Consejo de Estado, presidido desde 2018 por Bruno Lasserre, estima en su decisión que «la difusión del virus que se ha agravado de manera significativa en todo el territorio revela que las personas vacunadas pueden ser portadoras del virus y contribuir, por tanto, a su propagación en proporciones que hoy por hoy no conocemos», lo que le lleva a estimar que «el levantamiento de las restricciones al desplazamiento podría agravar el riesgo de contaminación, particularmente para las personas vulnerables que no están todavía vacunadas de forma mayoritaria».

Por dichas razones, el Consejo de Estado estima que las restricciones de desplazamiento, incluso para las personas vacunadas, «no aparecen como desproporcionadas» y por ello rechaza la demanda presentada por la residente en uno de los departamentos confinados.

21% de la población primovacunada en Pirineos Atlánticos

A fecha de 10 de abril 11 millones de personas habían recibido al menos una dosis de la vacuna anti covid-19 en el Estado francés.

En la región de Nueva Aquitania, que incluye a una docena de departamentos, incluido el de Pirineos Atlánticos, se habían inoculado a esa fecha 1,1 millones de dosis, lo que sitúa algo por encima del 18% la tasa de vacunación completa, si bien solo un 6% de la población ha recibido las dos dosis.

El departamento que integra a Ipar Euskal Herria es el segundo de la región que ha vacunado más: algo más de 145.000 personas habían recibido a 12 de abril una dosis, lo que eleva al 21% el porcentaje de personas monovacunadas en el territorio, informa la Prefectura de Pirineos Atlánticos.

Sin embargo, sobre todo por efecto de la variante británica, prevalente en un porcentaje superior al 85%, la tasa de positividad sigue en aumento en el departamento de Pirineos Atlánticos, donde, sin embargo, se confirma la bajada progresiva de la tasa de incidencia acumulada a siete días.

Ese parámetro ya ha vuelto a caer por debajo del centenar de casos por 100.00 habitantes. Si bien hay que tener en cuenta que en el largo fin de semana de Pascua apenas se realizaron test.

El 12 de abril el departamento que incluye a Iparralde marcó la cota de 92 casos por 100.000 habitantes, según los datos facilitados por la Agencia Regional de Salud (ARS).

Una cifra todavía lejana de los 50 casos por 100.000 habitantes que llevaron al norte de Euskal Herria a figurar en verde a mediados de febrero, antes de que comenzaran a subir de nuevo los contagios.