El Gobierno de Nafarroa ha logrado la identificación de los restos de dos personas asesinadas en la fosa de Urbikain, en el señorío de Etxalatz (Eguesibar), a través del banco de ADN público impulsado por el Instituto Navarro de la Memoria en colaboración con el laboratorio de Nasertic. Estos restos fueron exhumados en el verano de 2019.
Se trata de Joaquín Arroyo Alfaro y de Tomás Salinas Beorlegui, asesinados tras ser sacados de la Prisión Provincial de Iruñea el 9 de marzo de 1937. Hasta la fecha se creía que Joaquín Arroyo había sido asesinado en Etxauri y Tomás Salinas en Ororbia. La proximidad fonética entre Etxalatz y Etxauri pudo provocar el equívoco en la transmisión oral del testimonio, según señala el Gobierno navarro.
En Etxalatz fueron exhumados diez cuerpos en dos exhumaciones, seis en septiembre de 2018 y cuatro en julio de 2019 (dos de estos últimos ahora identificados). Después de cotejar los perfiles genéticos de los restos óseos con los de todas las muestras aportadas por los familiares al banco de ADN, se desconoce la identidad de los restantes. Se ha descartado que correspondan a ninguno de los muertos el 9 de marzo de 1937 o en fechas próximas, al menos de los que se dispone de muestra de ADN.
Las últimas identificaciones genéticas han demostrado que en ocasiones las víctimas fueron asesinadas y enterradas en un lugar distinto al que se pensaba. Por ello, el Gobierno de Nafarroa hace un llamamiento a los familiares que no han aportado su muestra de ADN para que contacten con el Instituto Navarro de la Memoria, ya que es el paso previo y fundamental para lograr nuevas identificaciones. En este sentido, el Gobierno agradece la colaboración que vienen prestando las asociaciones de familiares y memorialistas, y en este caso concreto de Affna36.