Maite Ubiria
Aktualitateko erredaktorea, Ipar Euskal Herrian espezializatua / redactora de actualidad, especializada en Ipar Euskal Herria

Gipuzkoa y Pirineos Atlánticos plantean un presupuesto transfronterizo participativo

El diputado general de Gipuzkoa, Markel Olano, y el presidente del consejo departamental de Pirineos Atlánticos, Jean-Jacques Lasserre, han firmado este lunes en Baiona un convenio de cuatro años que aspira a dar mayor profundidad a dos décadas de colaboración transfronteriza.

Firma del convenio a cargo de Jean-Jacques Lasserre y Markel Olano, este mediodía, en Baiona. (NAIZ)
Firma del convenio a cargo de Jean-Jacques Lasserre y Markel Olano, este mediodía, en Baiona. (NAIZ)

La cuarta convención firmada este 19 de abril por las instituciones guipuzcoana y de Pirineos Atlánticos se marca el objetivo de «situar la cuestión transfronteriza en en el corazón del plan de relanzamiento de nuestros territorios» en el contexto de la crisis sanitaria.

Acompañados en la comparecencia por la alcaldesa de Biarritz y electa de la institución departamental, Maider Arosteguy, y por Eider Mendoza, diputada de Gobernanza y portavoz de la institución foral, tanto Jean-Jacques Lasserre como Markel Olano han insistido que la excepcional situación sanitaria anima a «avanzar con más ambición en la colaboración transfronteriza», también con la vista puesta en recabar el apoyo europeo para proyectos de recuperación económica con alusión expresa al programa Next Generation.

Convencidos de que «el trabajo y la confianza dan resultados», ambos mandatarios han suscrito el convenio 2021-2024 que establece cuatro grandes ejes de colaboración: las políticas sociales, la movilidad y ordenación territorial, la igualdad y la gobernanza y participación ciudadana, con un proyecto novedoso, que llevará a «poner en marcha un presupuesto transfronterizo participativo para el otoño de 2021».

En el primer capítulo se pone como prioridad desarrollar un trabajo compartido sobre envejecimiento activo y saludable de la población con el objetivo de presentar una iniciativa europea de la mano de otras instituciones, como el Gobierno de Gasteiz, para crear un «europolo» en el ámbito de servicio.

El segundo proyecto mayor de este área pasaría por «estructurar un ecosistema transfronterizo» en materia de servicios a la infancia «para responder mejor a las necesidades de las familias».

Baiona-Iruñea-Donostia, en bicicleta

En el eje de movilidad destaca el proyecto de completar la red de vías para bicicletas, en el que se implica también el Gobierno de Nafarroa.

Financiado con 9,6 millones, de ellos un 65% de fondos europeos, Ederbidea debe completar para finales de año la conexión Baiona-Iruñea-Donostia. El proyecto está ya en marcha y, cara a fomentar la movilidad en bicicleta, se completará con una red transfronteriza de escuelas para aprender a circular en dos ruedas así como con talleres de reciclaje y reparación de bicicletas.

El tercer eje concierne a la igualdad y el convenio completará actuaciones precedentes en esta materia con una experiencia piloto destinada a sensibilizar a los más jóvenes sobre las desigualdades de género -labor, sin duda necesaria, a la vista de la persistencia de situaciones lacerantes, como las derivadas de los alardes excluyentes en Hondarribia e Irun- y la violencia contra las mujeres.

El presupuesto tranfronterizo participativo es el elemento más novedoso del nuevo convenio. El proyecto de cuentas será lanzado en otoño de 2021, estará abierto a la participación de todo residente en Gipuzkoa o en el departamento que incluye a Ipar Euskal Herria pero también a Bearn, y su dotación se acercará a los 300.000 euros.

La firma del convenio ha permitido a ambos representantes institucionales trasladar un mensaje de compromiso con «la apertura» de los dos territorios en un contexto de restricción de la movilidad y de limitaciones debidas a la pandemia especialmente estrictas al norte del Bidasoa.

Cierre de mugas

La actividad trasfronteriza se ha visto fuertemente impactada por esta pandemia. Así lo constataba la directora de la Eurorregión Nueva Aquitania-Navarra-Euskadi, Arola Urdangarin, en esta entrevista concedida a Mediabask en mayo de 2020.

Reunidos en abril de 2021 bajo la presidencia de turno del lehendakari Iñigo Urkullu representantes de la eurorregión hacían constar ese balance negativo y abogaban por levantar los controles de la muga.

La Prefectura de Pirineos Atlánticos hizo un gesto con la reapertura de tres de los ocho pasos cerrados en enero de 2021.

Sin embargo, ese primer paso para desatascar el paso en la muga coincidía con una decisión de Madrid destinada a reimplantar controles en los pasos, y solicitar al igual que los agentes franceses la presentación de PCR, lo que ha vuelto a reforzar de facto el bloqueo en la muga.

Unas decisiones que han sido cuestionadas por unas instituciones locales que se han visto relegadas en la toma de decisiones.

La situación de pandemia no ha redundado, como cabria esperar, en una mayor coordinación a ambos lados de la muga.

De hecho, excepto en contextos de urgencia extrema, como los incendios en la zona del Bidasoa, en que tal como ha destacado Markel Olano han actuado equipos a ambos lados de la muga, no se ha visto a autoridades de los dos lados de los Pirineos compartiendo iniciativas en materia sanitaria.

Con todo, la firma del convenio entre Gipuzkoa y Pirineos Atlánticos ha servido a sus representantes institucionales para reiterar su «voluntad estable» de perseverar e ir más allá en la colaboración transfronteriza, y por lo tanto en las prerrogativas que otorga el marco europeo, según han remarcado en sus intervenciones los representantes de ambas instituciones reunidos en la sede del departamento en Baiona.