La Rochelle y Toulouse, segundo y líder en la clasificación del Top 14, disputarán el 22 de mayo en Twickenham la gran final de la Champions Cup de rugby, después de imponerse este fin de semana en semifinales a Leinster y Bourdeaux-Begles, respectivamente.
El encuentro por el título se iba a jugar en principio en el Vélodrome de Marsella, pero ya se sabe que el hombre propone y el covid dispone, por lo que la semana pasada se decidió trasladarlo a Inglaterra porque la vacunación y la pandemia evolucionan mejor al otro lado del canal de La Mancha, y ello a su vez va a permitir que asista público a La Catedral, un máximo de 10.000 personas.
La Rochelle acudirá al mítico estadio londinense como novato en estas lides. Otro paso en el crecimiento del club gualdinegro desde su último ascenso al Top 14 en la temporada 2013-2014, de la mano de Patrice Collazo, ahora en Toulon. Su relevo lo tomó en 2018 el neozelandés Jono Gibbes.
En 2017 llegó a semifinales del Top 14, y en 2019 repitió y además fue subcampeón de la Challenge Cup. Dos años después está cerca de hollar la cima, después de doblegar a un histórico como Leinster. Los dublineses seguirán con sus cuatro cetros continentales, el último de ellos conseguido en San Mamés en 2018.
En semifinales, el conjunto francés fue amasando a su rival hasta que este no pudo aguantar más y tuvo que torcer el brazo en el último cuarto. Los ensayos de Alldritt y el gigante Skelton llevaron al marcador la potencia de la delantera de La Rochelle, que decidió el partido con un parcial de 14-0 entre los minutos 65 y 73. El ensayo postrero de Byrne solo sirvió para maquillar el marcador (32-23).
Once años después
El papel de equipo experto le corresponderá a Toulouse, que aspira a ser el primero en conseguir cinco Champions. Han pasado once años desde su última final, la que ganó frente a Biarritz en 2010 en el Stade de France.
Posteriormente los occitanos ganaron el Top 14 en 2011 y 2012, antes de pasar su particular travesía por el desierto, de la que regresaron con Ugo Mola a los mandos de la nave. La semifinal del sábado ante Burdeos fue un partido equilibrado entre dos equipos serios, bien puestos en defensa y que no dudaron en usar el pie para tratar de que se jugara en campo contrario.
El choque se decidió en el minuto 71, cuando la tres cuartos rojinegra logró romper la línea bordelesa con un par de pases tras contacto. Antoine Dupont –el medio de melé de Lannemezan es el nombre propio del rugby europeo en los últimos meses– se encargaba de comprar el billete a Londres al posar el oval en la zona de ensayo rival.
Leicester vs Montpellier
También se han disputado las semifinales de la Challenge Cup, cuya final se jugará en el mismo escenario pero un día antes, el viernes 21 de mayo. Leicester será el representante de la Premiership inglesa, tras apear a los irlandeses de Ulster. Los Tigers remontaron un 6-17 adverso para terminar 33-24. Su rival será Montpellier, que doblegó a domicilio a Bath (10-19).