Como informó NAIZ el martes, el Departamento de Seguridad que dirige Josu Erkoreka ha remitido a la Fiscalía pintadas, carteles y mensajes de Ernai con la presunción de que constituyen un delito de odio contra la Ertzaintza. La decisión que ha sido criticada por EH Bildu y Elkarekin Podemos-IU.

La portavoz independentista, Maddalen Iriarte, preguntada sobre el tema, ha respondido diciendo que «lo voy a intentar decir de la manera más serena posible. Esto es un disparate político y jurídico que puede tener unas consecuencias gravísimas para algunos jóvenes de este país».

En opinión de la portavoz del grupo de EH Bildu en el Parlamento, «este es un Gobierno que está dejando en evidencia todas sus incapacidades y su falta de proyecto. Un Gobierno que, en vez de dar solución a los gravísimos problemas que tienen las y los jóvenes, cree que mintiendo reiteradamente y atacando a la juventud y al conjunto del movimiento soberanista y de izquierdas va a conseguir tapar sus enormes carencias».
 
Pero, según Maddalen Iriarte, «lo de inventarse delitos con el único objetivo de que algunos jóvenes terminen declarando en los tribunales es gravísimo, un disparate que supera todos los límites».

Por su parte, la portavoz de Elkarrekin Podemos-IU, Miren Gorrotxategi, asegura que «no parece muy sensato» utilizar este tipo de delito para una campaña de carteles sobre la Ertzaintza. Ha recordado que el «delito de odio» se instituyo para proteger a grupos minoritarios y personas que puede sufrir discriminación, no para proteger a las autoridades públicas o al Gobierno.

Protestas por la brutalidad policial

El pasado 7 de mayo, la Ertzaintza cargó con dureza e incluso con brutalidad contra movilizaciones convocadas por Ernai por la «situación de emergencia» que vive la juventud y en demanda de un cambio social y soberanía. Tras la intervención policial, hubo sesenta heridos y de los ocho detenidos cuatro requirieron asistencia sanitaria.

En protesta por ello, Ernai ha firmado mensajes en la red y ha colocado carteles y realizado pintadas en varios batzokis.

El Departamento de Seguridad ha remitido a la Fiscalía esas pintadas, carteles y mensajes de Ernai por si pudieran ser constitutivos de un delito de odio contra la Ertzaintza, según confirmaron a este medio fuentes oficiales. Existe ya un cierta doctrina en Derecho de que los cuerpos policiales no pueden ser considerados «grupos vulnerables» por razones de raza, orientación sexual, religión u otras que son las que pretende proteger el artículo 510 del Código Penal. También hay sentencias que niegan que pueda aplicarse para actuaciones contra las Fuerzas de Seguridad del Estado.