De histórica se puede calificar la decisión de la UEFA de que a partir de la próxima campaña los goles marcados fuera de casa ya no tengan valor doble en el caso de que se produzca un empate en la eliminatoria entre dos conjuntos.

La norma, que para muchos puede ser considerada tan antigua como el mismo fútbol, en realidad se instauró a partir de 1965 y, desde dicho año, ha sido un factor tan importante que incluso ha influido en las tácticas y planteamientos de los equipos y sus técnicos a la hora de afrontar un cruce con otro rival.

«Es justo decir que la ventaja de jugar en casa ya no es tan importante como antes», ha asegurado el presidente de la UEFA, Aleksander Ceferin, quien ve en la regla ahora abolida un problema, pues «disuade a los equipos locales de atacar porque temen un gol que daría a sus rivales una ventaja crucial».

«También se critica la injusticia, especialmente en la prórroga, de obligar al equipo local a marcar dos veces cuando el equipo visitante ha anotado», ha ampliado el máximo dirigente del órgano futbolístico del viejo continente.

Ha reconocido que dicha supresión «se ha debatido en varias reuniones de la UEFA en los últimos años» y que, «aunque no ha habido unanimidad de opiniones, muchos entrenadores, aficionados y otras partes interesadas en el fútbol han cuestionado su justicia y han expresado su preferencia por la abolición de la regla».

Inversión en las estadísticas

La UEFA ha esgrimido como argumento añadido que las estadísticas desde mediados de la década de 1970 hasta ahora muestran una clara tendencia a la reducción de la diferencia entre las victorias en casa y a domicilio (del 61%/19% al 47%/30%).

Además, también ha disminuido la brecha en la media de goles por partido en casa y fuera (del 2,02/0,95 al 1,58/1,15) en las competiciones masculinas, mientras que desde la 2009/10 la media de goles en la Liga de Campeones femenina se ha mantenido muy estable, con un promedio de 1,92 para los equipos locales y 1,6 para los visitantes.

Considera el órgano futbolístico que en ello han influido factores como la mayor calidad de los terrenos de juego, la mejora de las infraestructuras, la mayor atención al arbitraje con la introducción reciente de la tecnología de la línea de gol y el VAR, la cobertura televisiva más sofisticada, las condiciones de viaje más cómodas, un calendario comprimido que impone la rotación de las plantillas y los cambios en los formatos de las competiciones.

Una vez eliminada esta regla, tampoco se aplicará «en los criterios utilizados para determinar la clasificación cuando dos o más equipos estén igualados a puntos en la fase de grupos, es decir, los criterios aplicados a los partidos jugados por los equipos en cuestión».

Por contra, «no se eliminarían de los criterios adicionales aplicados a todos los partidos de la fase de grupos si los equipos permanecen igualados (mayor número de goles marcados fuera de casa en todos los partidos de la fase de grupos), con el fin de mantener un número máximo de criterios deportivos», ha aclarado la UEFA.

Prórroga y penaltis

A partir de ahora, las eliminatorias en las que los dos equipos marquen el mismo número de goles en los dos partidos no se decidirán por el número de goles anotados fuera de casa, sino que se jugará una prórroga con dos periodos de 15 minutos al final del encuentro de vuelta.

En caso de que los equipos marquen el mismo número de goles o no marque ninguno durante esa prórroga, los lanzamientos desde el punto de penalti determinarán el equipo que se clasifica para la siguiente fase de la competición.