El equipo de Gobierno del Ayuntamiento de Bilbo ha aprobado este miércoles congelar, por segundo año consecutivo, los impuestos y tasas municipales del próximo ejercicio 2022, por lo que seguirán en vigor las actuales ordenanzas fiscales.

El Gobierno municipal, formado por PNV y PSE, asegura que se trata de una decisión «con la que se quiere hacer frente a los efectos que sigue produciendo la pandemia, con toda una serie de actuaciones que contribuirán a ayudar a los sectores y empresas más perjudicados, así como no afectar con más cargas a la ciudadanía bilbaina».

Junto a la congelación de los tributos municipales, el equipo de Gobierno ha decidido también mantener los beneficios fiscales y las facilidades de pago existentes a los contribuyentes que «repercuten directamente en el tejido empresarial de la ciudad así como en los ciudadanos, con medidas como exclusión del pago de tasas al sector de las barracas, terrazas, etc».

Esta decisión, «supone un esfuerzo importante de contención fiscal», enfatiza el consistorio, que se ha traducido en el presente ejercicio en una menor recaudación de más de 2 millones de euros.

Este miércoles se ha aprobado también una serie de modificaciones de carácter técnico y de adaptación a los cambios normativos.

Marta Ajuria, concejala de Hacienda, ha informado de todas estas propuestas en Comisión a los grupos municipales, iniciándose así el trámite para la presentación de enmiendas, previo al debate de aprobación inicial que se realizará en el próximo pleno de setiembre.

EH Bildu

El grupo municipal de EH Bildu ha denunciado hoy que la congelación de tasas e impuestos anunciada por el Gobierno municipal «no se ajusta a la realidad social de los y las bilbaínas» y que «otra vez más se pierde la oportunidad de ahondar en una fiscalidad más justa y progresiva».

«Solamente se han planteado pequeñas modificaciones en la aplicación de tasas, y tenemos que analizar en profundidad esas pequeñas modificaciones, para conocer el calado que tienen y proponer alternativas si fuera necesario», ha matizado el concejal Asier González.

En ese sentido, el concejal de la coalición soberanista ha señalado que, las ordenanzas fiscales del pasado año «no beneficiaban a las y los bilbainos con menos recursos y premiaban la actividad de constructoras y grandes intereses empresariales, trasladando así la carga fiscal al conjunto de la ciudadanía». «Por tanto para el año 2022 ocurrirá más de lo mismo, sin tener en cuenta las graves consecuencias socioeconómicas que está acarreando la pandemia entre los y las bilbaínas», ha añadido.

Por ello, EH Bildu ha señalado que seguirá proponiendo políticas fiscales justas por durante la campaña 2022, en materia de vivienda, tasa turística, fiscalidad con perspectiva de género...

Elkarrekin Podemos

En esta misma línea se ha pronunciado el grupo municipal de Elkarrekin Podemos, que tras considerar que con esta medida de congelar las tasas el equipo de gobierno consolida «un modelo fiscal poco progresivo y nada redistributivo», ha apostado por mantener invariables los impuestos que «no discriminan por capacidad económica» y modificar los que diferencian según el patrimonio.

«Tiene que pagar más el que más tiene, para que el Ayuntamiento pueda aumentar su recaudación y disponga de los recursos económicos necesarios para financiar de forma suficiente y sin recortes los servicios públicos», según precisa este grupo político en un comunicado.