Mujeres heridas llegan a un hospital para recibir tratamiento después de dos explosiones. (Wakil KOHSAR/AFP)
Mujeres heridas llegan a un hospital para recibir tratamiento después de dos explosiones. (Wakil KOHSAR/AFP)
Una imagen de satélite muestra el área alrededor de la Puerta de la Abadía en el aeropuerto internacional Hamid Karzai en Kabul. (HANDOUT)
Una imagen de satélite muestra el área alrededor de la Puerta de la Abadía en el aeropuerto internacional Hamid Karzai en Kabul. (HANDOUT)
El personal médico mueve una camilla para atender a las personas heridas para el tratamiento después de las explosiones. (Wakil KOHSAR/AFP)
El personal médico mueve una camilla para atender a las personas heridas para el tratamiento después de las explosiones. (Wakil KOHSAR/AFP)
Los voluntarios y el personal médico atienden a un hombre herido. (Wakil KOHSAR/AFP)
Los voluntarios y el personal médico atienden a un hombre herido. (Wakil KOHSAR/AFP)
Voluntarios y personal médico descargan cuerpos de una camioneta fuera de un hospital. (Wakil KOHSAR/AFP)
Voluntarios y personal médico descargan cuerpos de una camioneta fuera de un hospital. (Wakil KOHSAR/AFP)
El personal médico traslada a un hombre herido en una camilla. (Wakil KOHSAR/AFP)
El personal médico traslada a un hombre herido en una camilla. (Wakil KOHSAR/AFP)
Los médicos atienden a un hombre herido durante las explosiones. (Wakil KOHSAR/AFP)
Los médicos atienden a un hombre herido durante las explosiones. (Wakil KOHSAR/AFP)
Médicos trasladan a una persona herida en ambulancia. (Wakil KOHSAR/AFP)
Médicos trasladan a una persona herida en ambulancia. (Wakil KOHSAR/AFP)
Voluntarios y personal médico traslada a un hombre herido en una camilla. (Wakil KOHSAR/AFP)
Voluntarios y personal médico traslada a un hombre herido en una camilla. (Wakil KOHSAR/AFP)
Médicos trasladan a un niño herido. (Wakil KOHSAR/AFP)
Médicos trasladan a un niño herido. (Wakil KOHSAR/AFP)
NAIZ

Los muertos en el atentado junto al aeropuerto de Kabul se elevan a más de 160 personas

El balance de víctimas mortales se eleva ya a más de 160 personas a raíz del atentado ocurrido este jueves en el acceso al aeropuerto de Kabul y reivindicado por el Estado Islámico (ISIS). Muchas de las víctimas formaban parte de la multitud que intentaba alcanzar uno de los vuelos de evacuación.

El número de las víctimas provocadas por el atentado ocurrido a última hora de la tarde de este jueves en Kabul (hacia las 15.30 horas en Euskal Herria) va elevándose según pasan las horas. Son ya más de 130 civiles afganos a los que hay que añadir los 13 soldados estadounidenses fallecidos en el ataque que ha confirmado el Pentágono.

Además, podría haber también más de una veintena de talibanes muertos y son más de 200 las personas heridas de distinta gravedad, según ha informado la cadena CNN, que cita fuentes del Ministerio de Salud afgano.

Solo el hospital Wazir Akbar Khan de la capital afgana ha recibido 145 cuerpos sin vida tras el atentado en el aeropuerto de la capital y medio centenar recibe atención con heridas graves, han afirmado este viernes fuentes sanitarias.

Otros 16 fallecidos se contabilizaron en el hospital de la ONG italiana Emergency en Kabul, mientras que en ese centro unos 40 pacientes fueron ingresados también con lesiones por la explosión, según la misma fuente.

Hacia las 22:00 horas del viernes en Euskal Herria, el Estado Islámico (ISIS) ha reivindicado el ataque en un comunicado remitido por su agencia de propaganda, Amaq, al sitio especializado Site Intelligence. En ese comunicado se indica que uno de sus combatientes ha franqueado «todas las fortificaciones de seguridad» y se ha aproximado a menos de «5 metros de los militares estadounidenses» antes de activar su cinturón de explosivos.

Esta versión coincidiría con los últimos datos que llegan de Estados Unidos que hablarían de un único atentado y no de dos como se especuló en las primeras horas.

 

El Pentágono advierte de nuevas «amenazas activas»

Horas después del atentado, el jefe del Comando Central de EEUU (CENTCOM), general Kenneth McKenzie, ha indicado que al menos 12 soldados de ese país han muerto y 15 han resultado heridos. Este viernes ya se habla de uno más.

En una rueda de prensa en el Pentágono, en la que ha intervenido telemáticamente, McKenzie ha afirmado que se trató de un atentado suicida perpetrado por miembros del ISIS.

Además, ha advertido de que todavía hay «una serie de amenazas activas» contra el aeropuerto de Kabul, que van desde un posible ataque con cohetes a un atentado con coche bomba.

McKenzie ha explicado en una rueda de prensa que las fuerzas estadounidenses han estado «compartiendo información con los talibanes» y tienen intención de seguir «coordinándose» para evitar más ataques.

El general ha argumentado que Washington y el grupo insurgente comparten un «propósito común» en la misión de evacuación que tiene previsto concluir el 31 de agosto.

«Ellos (los talibanes) tienen una razón práctica para querer que estemos fuera para el 31 de agosto. Ellos quieren volver a tomar control del aeropuerto. Nosotros también queremos irnos en esa fecha, si es posible hacerlo. Así que compartimos un propósito común», ha afirmado.

McKenzie ha indicado que esa colaboración está siendo «útil» y que los talibanes han frustrado «algunos ataques» contra el aeropuerto.

Situación caótica en los primeros momentos

Previamente, diferentes personas señalaban, a través de las redes sociales, que la situación en el aeropuerto era caótica mientras que los soldados intentaban evacuar la zona.

La corresponsal de Al-Jazeera Charlotte Belis ha señalado que todavía no estaba claro quién ha podido  desencadenar la explosión, mientras que diferentes fuentes apuntan al Estado Islámico de Jorasán (que es como los yihadistas se refieren a Afganistán).

Según la CNN, que citaba fuentes de los soldados estadounidenses allí desplazados, la primera deflagración se ha producido en una de las puertas de entrada al aeródromo y ha podido ser protagonizada por un suicida. Al-Jazeera añadía que ha sido seguida de disparos y que sin duda hay víctimas.

El portavoz del Pentágono, John Kirby, ha confirmado en Twitter dos explosiones, una en la Abbey Gate que da acceso al Aeropuerto Internacional Hamid Karzai y otra en el cercano hotel Baron.

Entretanto, más de 5.000 personas están en el aeropuerto de Kabul a la espera de ser trasladadas fuera de Afganistán, según el Departamento de Defensa de Estados Unidos, que ha elevado a 111.000 la cifra de evacuaciones completadas desde que los talibán se hicieron con el control de la capital afgana el 15 de agosto.

Estos han confirmado han que no dejarán salir a nadie después del martes, 31 de agosto, pero el aumento de la tensión puede acelerar el final de la caótica evacuación.

Los gobiernos de Estados Unidos, Gran Bretaña o Australia habían dado esta mañana la voz de alarma sobre la posibilidad de un atentado en el aeropuerto, y al igual que otros habían exhortado a sus nacionales a abandonar la zona y buscar un lugar seguro.

Condena del régimen talibán

Un portavoz de los talibanes ha señalado que «condenan» estos atentados registrados en una zona bajo «responsabilidad» estadounidense, según ha informado AFP. Varios de sus portavoces han subrayado en Twitter el compromiso del grupo con la seguridad de la población afgana.

También ha condenado el atentado Abdula Abdula, antiguo negociador del Gobierno de Ashraf Ghani y figura clave en las conversaciones en marcha con los talibanes para tratar de conformar una administración inclusiva y evitar el vacío de poder. «Condeno rotundamente el ataque terrorista», ha dicho Abdula, que ha hecho alusión al «gran número» de víctimas civiles.

Biden: «Haremos que lo paguéis»

Hacia las 23.30 en Euskal Herria, el presidente de EEUU, Joe Biden, ha ofrecido un discurso a la nación, en el cual ha lanzado un claro mensaje a los autores del atentado: «Os perseguiremos y haremos que lo paguéis».

En ese sentido, ha revelado que ha pedido a los jefes de las Fuerzas Armadas que elaboren diferentes planes para atacar al Estado Islámico (EI) en represalia por el atentado en Kabul, que se ha cobrado la vida de 12 soldados estadounidenses, a los que se ha referido como «héroes», y de decenas de afganos.

El inquilino de la Casa Blanca ha anunciado que responderá «con fuerza y precisión en el momento adecuado, en el lugar que elijamos, en el momento que elijamos».

Además, ha reiterado la intención de completar la evacuación. «Podemos y debemos completar esta misión. Los terroristas no nos amedrentarán. Vamos a seguir con la evacuación», ha sentenciado.

Biden ha defendido además la colaboración con los talibán en la evacuación. «Hoy han salido 5.000 estadounidenses. No es una cuestión de confianza, sino de interés común. No hay pruebas de que haya una colaboración entre los talibán y Estado Islámico», ha explicado.

Biden, en su comparecencia posterior al atentado en el aeropuerto de Kabul. (Jim WATSON/AFP)

Desde la ONU, su secretario general, António Guterres, ha condenado y ha recordado que es responsabilidad de las autoridades de facto la protección de los civiles y la infraestructura civil, incluido el aeropuerto.

Igualmente ha condenado el atentado el Alto Comisionado de Naciones Unidas para los Refugiados (ACNUR), Filippo Grandi, que ha pedido «hacer más» por los afganos que están en peligro y que necesitan ayuda y por «quienes son desplazados o refugiados» en los países vecinos.

Por su parte, el presidente del Consejo Europeo, Charles Michel, ha expresado su preocupación por el atentado y ha reiterado la petición de la UE de garantizar vías de acceso seguras hacia el aeródromo.

La canciller alemana, Angela Merkel, ha denunciado esta acción «absolutamente despreciable». En la misma línea, el presidente francés, Emmanuel Macron ha afirmado que su país se «coordinará» con sus «aliados americanos» para hacer frente a la «tensa situación».

El puente aéreo se deshace

Al margen del atentado, los aliados de EEUU están poniendo fin a las tareas de evacuación tal como se decidió tras la cumbre del G7 que tuvo lugar el pasado martes.

Poco después de las explosiones, la ministra alemana de Defensa, Annegret Kramp-Karrenbauer, ha anunciado el fin del puente aéreo desde Kabul para evacuar a los nacionales alemanes y los colaboradores afganos.

El Gobierno de Países Bajos también ha señalado que ha realizado su último vuelo de evacuación, en respuesta a la petición del Ejército de EEUU.

Italia tardará un poco más. «En las próximas horas concluirán las operaciones de evacuación. Ahora es necesario elaborar la ‘fase 2’, con una perspectiva a corto y medio plazo, ordenada, estructurada y estratégica», ha explicado su ministro de Exteriores, Luigi di Maio al explicar la situación en Afganistán durante el Consejo de Ministros presidido por Mario Draghi.

Canadá ha procedido a la salida de la mayoría de las fuerzas especiales que estaban operando en la capital afgana para facilitar la salida de canadienses y refugiados. Pero ha reconocido que todavía hay canadienses y afganos que han solicitado refugio en Canadá que no han podido abandonar el país.

En cambio, Boris Johnson ha señalado que la operación para evacuar a personal británico y colaboradores afganos de Kabul continuará pese al ataque en las inmediaciones del aeropuerto.

El primer ministro británico ha presidido una reunión de emergencia con los principales ministros y responsables de seguridad de su gabinete. «Nuestra conclusión ha sido que podemos continuar con el programa (de evacuación) del modo como lo estábamos haciendo», ha declarado a los medios.

Británicos entre las víctimas mortales

Dos personas con nacionalidad británica y un menor de padres británicos murieron en el ataque del jueves en Kabul, ha informado este viernes el ministro de Exteriores del Reino Unido, Dominic Raab.

«Eran personas inocentes. Es una tragedia que cuando trataban de poner a salvo a sus seres queridos en el Reino Unido fueron asesinados por cobardes terroristas», ha afirmado en un comunicado Raab, que ha detallado que otros dos ciudadanos británicos resultaron heridos.

El Ministerio de Defensa ha puntualizado que no hubo militares ni personal de la misión británica afectados.

El jefe de la diplomacia británica ha afirmado que el «despreciable ataque» dejó patente «los peligros que afrontan aquellos que están en Afganistán» y ha recalcado que el Ejército británico «continúa haciendo todo los posible para sacar a la gente» en las últimas horas de su plan de evacuaciones.

«No daremos la espalda a aquellos que han acudido a nosotros en momentos de necesidad y nunca nos acobardaremos ante los terroristas», ha dicho el ministro.

Sin embargo, el titular de Defensa, Ben Wallace, ha admitido que no todas las personas que tendrían derecho a ser evacuadas por Gran Bretaña podrán abandonar del país antes de que se retiren los militares británicos.

«Vamos a procesar a la gente que hemos traído con nosotros, a las aproximadamente mil personas que están ahora en el aeropuerto y buscaremos la manera de identificar a algunas personas (más) entre la multitud, pero, en términos generales, la operación para procesarles está ya cerrada», ha declarado el ministro en una entrevista con "Sky News".