El coordinador del LABI técnico, Jonen Fernández, cree que es «poco prudente» que se reclame que se flexibilicen ya las restricciones frente a la covid-19, y que aún no debe retirarse la obligación de utilizar la mascarilla en determinados espacios.

Ha anunciado este miércoles en el Parlamento que la variante Delta supone ya el 95% de los casos de esta enfermedad que se detectan en la CAV, tras experimentar una evolución «explosiva» desde el pasado mes de junio.

Fernández ha comparecido este miércoles ante la Comisión de Salud para informar sobre la situación epidemiológica en la CAV, donde el índice de incidencia acumulado del coronavirus en los últimos 14 días se sitúa en 223 casos por cada 100.000 habitantes, 17 puntos menos que la cifra de este pasado martes.

Además de actualizar el dato sobre la incidencia de la covid, el coordinador de la comisión técnica del LABI, el grupo de expertos que asesora al Ejecutivo de lakua sobre las medidas frente a la covid, ha informado que el índice de reproductividad del virus es de 0,8, tres décimas menos que el martes.

A su vez, el número de pacientes con covid-19 ingresados en las Unidades de Cuidados Intensivos (UCI) de los hospitales de la CAV se sitúa en 60, dos menos que el martes.

83% con pauta vacunal completa

En cuanto al avance de la campaña de vacunación, ha informado de que el 83% de la población a la que está destinada ha recibido ya la pauta vacunal completa.

En su intervención, Fernández ha insistido en la «explosiva evolución» que ha experimentado la variante Delta de la covid en los últimos meses. El 25 de junio, esta variante suponía el 15% de los casos de coronavirus registrados, mientras que en la actualidad representa el 95%.

El coordinador de la comisión técnica del LABI ha afirmado que algunos de los principales objetivos del Gobierno para las próximas semanas son que la tasa de incidencia acumulada de la covid pueda situarse por debajo de los 150 casos por cada 100.000 habitantes; que la ocupación de las UCI se reduzca a las cifras «más bajas» del ‘Escenario 1' del plan de gestión de la pandemia, Biziberri; y lograr que la pauta completa de la vacuna llegue al 90% de la población de más de doce años para finales de octubre.

El LABI también tendrá, para «las próximas semanas y meses», el reto de «valorar en qué momento esta enfermedad deja de ser una afección crítica para el funcionamiento de la sociedad». Esta reflexión, según ha indicado, «puede suponer un punto inflexión en la gestión de la pandemia».

Las previsiones de este LABI fallaron estrepitosamente al inicio del verano, cuando Iñigo Urkullu afirmó que no se contemplaba pasar de una incidencia 300 y acabó superando los 700. No ha habido autocríticas ni asunción de responsabilidades por ello.

Distintos escenarios

Fernández considera que la situación »permite pensar en un escenario positivo» para el futuro. No obstante, ha recordado las «experiencia pasadas» con las sucesivas olas de la pandemia, por lo que ha indicado que se ha de trabajar con distintos escenarios posibles.

Uno de esos escenarios es el de que la evolución epidemiológica siga mejorando y «permita una relajación» de las medidas preventivas, incluida una flexibilización de horarios y de aforos, así como una «mayor normalidad».

Sin embargo, y en referencia a un eventual recrudecimiento de la pandemia, ha alertado de que también hay que tener en cuenta «que nos podemos encontrar con cualquier sorpresa a partir de ahora».

«Tenemos dudas», ha reconocido Fernández, quien ha afirmado que la incertidumbre respecto a cómo puede evolucionar la crisis sanitaria es la causa de que no se concreten qué medidas podrían relajarse en un futuro.

En este sentido, considera «poco prudente» reclamar que se flexibilicen las restricciones en estos momentos y que aún no debe retirarse la obligación de utilizar la mascarilla en determinados espacios. Ha reiterado el llamamiento a la «cautela» y a la «prudencia» para avanzar «con paso seguro y sólido».

En todo caso, se ha mostrado «optimista» respecto a la forma en la que puede producirse el inicio del nuevo curso escolar, dado que ya existe la experiencia del curso pasado y que se ha avanzado de forma importante en la vacunación.

Críticas de la oposición

Por parte de la oposición, la parlamentaria de EH Bildu Rebeka Ubera ha denunciado que «poco ha cambiado para mejor» en la gestión de la pandemia desde las comparecencias del Gobierno ante el Parlamento de antes del parón veraniego.

Ubera ha criticado la falta de nuevas medidas para hacer frente a la pandemia, ha subrayado la necesidad de dotar de mecanismos de mejora de la calidad del aire a los centros educativos y al transporte público, y ha criticado que «cada vez se hacen menos» test diagnósticos.

Por su parte, el parlamentario de Elkarrekin Podemos-IU Jon Hernández ha echado en falta una «mayor profundidad» en las explicaciones de Fernández respecto a cuál ha sido la incidencia de las medidas adoptadas por el Ejecutivo autónomico para contener la pandemia.

Además, ha expresado su «preocupación» por el impacto que esta teniendo la crisis sanitaria en la salud mental de ciertos sectores de la población, y ha criticado la «falta» de recursos y de personal en Osakidetza.

Desde PP-Cs, Laura Garrido también se ha mostrado «preocupada» por los contagios que pueden producirse con el inicio del curso escolar entre los menores de doce años, para los que no existe una vacuna autorizada para la covid.

Además, ha reiterado sus críticas a la «falta de criterio» y a la «tardanza» de Lakua a la hora de reaccionar frente a la pandemia.

Críticas a la oposición y loas del PSE

Por parte de los grupos que apoyan al Gobierno, el parlamentario del PNV Luis Javier Telleria ha lamentado que la oposición mantenga sus «desesperados intentos de desgastar» al Ejecutivo con sus críticas a la gestión de la pandemia, y que no se hayan implicado en la «sensibilización social» para «arrastrar a la responsabilidad» a esa parte de la sociedad que está protagonizando «actitudes insolidarias» ante la pandemia.

«Esta es una labor no solo del Gobierno, sino de todos; y ahí, la oposición debe tener un papel fundamental», ha afirmado.

El parlamentario del PSE Ekain Rico ha lamentado que haya formaciones que se plantean estas comparecencias como una «repesca» de las celebradas antes del parón veraniego, «repitiendo una y otra vez» las mismas afirmaciones, lo que «empieza a aburrir».

De esa forma, ha criticado que se reproche a Fernández que no haya aportado información novedosa, y ha asegurado que es difícil aportar datos nuevos cuando Lakua está aportando «permanentemente» información actualizada sobre la pandemia.