El discurso partidista de una consejera del Gobierno de Lakua ha supuesto la ruptura de la confianza de quienes trabajan en la recuperación de la memoria histórica en Elgoibar. Así lo considera el grupo Elgoibar 1936, muy molesto por el hecho de que en el acto para presentar el Itinerario de la Memoria este domingo Beatriz Artolazabal interviniera para señalar que el preso Unai Parot «no era un gudari, sino un asesino».
El acto debía servir para mostrar el trabajo realizado por el Ayuntamiento de Elgoibar y el Gobierno de Lakua, con la colaboración de colectivos de recuperación de la memoria en los montes Zirardamendi, Aiastia-San Miguel, Morkaiku y Kalamua, escenarios de enfrentamientos armados en la Guerra de 1936. Era la primera presentación de este tipo que se realizaba en Gipuzkoa, pero la vigésima en la CAV. En Nafarroa, también se han llevado a cabo numerosos actos similares en los últimos años, el último el domingo en Elizondo. Por su naturaleza, se trata de actos en los que debe primar la recuperación de la memoria histórica y deben ser plurales políticamente y apartidistas.
Sin embargo, Artolazabal aprovechó la oportunidad para lanzar un mensaje extemporáneo sobre una polémica de actualidad que estuvo viva durante toda la semana, la convocatoria de un acto con la legislación penitenciaria de excepción en Arrasate que la derecha política y mediática española criminalizó presentándolo como un acto de homenaje a Unai Parot.
El PNV compró en gran parte este discurso y la propia Artolazabal acudió el pasado viernes a un acto organizado en Gasteiz por el Memorial de Víctimas del Terrorismo y la Delegación del Gobierno español en respuesta al acto de Arrasate. El sábado fue un día relativamente tranquilo al respecto, después de que Sare resignificará su movilización trasladándola a decenas de localidades y que el eco mediático que Vox y el PP lograron en Arrasate solo llegara a los más convencidos. Pero la consejera decidió tirar del mismo anzuelo llegado ya el domingo y en este marco.
Un trabajo de años, en cuestión
La convocatoria del domingo era para recordar a quienes murieron combatiendo al fascismo en Elgoibar en 1937. A abertzales, a socialistas, a comunistas, a anarquistas y a cualquier antifascista. Mezclar el recuerdo a quienes hicieron frente al franquismo con polémicas de 2021 es estéril y contraproducente. Así lo destaca Elgoibar 1936, que recuerda que llevan trabajando para la recuperación de la memoria histórica desde 2007, «cuando sacamos a un miliciano desconocido, después de hacer un agujero de cinco metros en Madarixa». Explican que no acudió nadie del Ayuntamiento de Elgoibar representando a los partidos, pero que estuvo el entonces alcalde, Alfredo Etxeberria, a título personal, no en nombre del PNV.
El Ayuntamiento de Elgoibar ha roto el marco de confianza. Tenemos plena voluntad de colaboración en la defensa y recomposición de la memoria , pero si quieren que un acto de este tipo se utilice con intereses partidistas, nosotros no estamos dispuestoshttps://t.co/PlotZWEi1D pic.twitter.com/hOGNvVzrji
— Elgoibar 1936 (@Elgoibar1936) September 19, 2021
En 2012, junto a Ahaztuen Oroimena y Aranzadi recuperaron los restos de cuatro gudaris, contando la presencia del lehendakari Iñigo Urkullu y la producción de un documental y un libro. «Nosotros estábamos encantados con el trabajo y el reconocimiento de la labor realizada, pero sobre todo porque volvimos a situar a Ziardamendi en el mapa de Euskal Herria. Durante 80 años esos gudaris y milicianos estuvieron totalmente olvidados. Al fin y al cabo, ese era nuestro trabajo y conseguimos nuestro objetivo», explican.
Sin embargo, la sensación de lo ocurrido el domingo es totalmente contrapuesta. «Hemos obervado con tristeza que esa presentación se ha convertido en un mitin político del PNV. En lugar de hablar de los gudaris muertos, han comenzado a hablar de Unai Parot y en ETB no siquiera han mencionado el propio recorrido de la memoria», lamentan.
Elgoibar 1936: «No nos invitaron a un mitin del PNV»
«Nosotros no fuimos invitados a un mitin político del PNV, y la utilización de gudaris y milicianos para intereses partidistas nos parece muy grave y de bajo nivel. En el acto se han mezclado cosas que nada tienen que ver y se ha enrarecido el ambiente, hasta el punto de que algunas personas han decidido abandonar el acto. Nos ha parecido vergonzoso», denuncia Elgoibar 1936.
«Ante esta situación, el Ayuntamiento de Elgoibar ha roto el marco de confianza. Tenemos plena voluntad y actitud de colaboración en la defensa y recomposición de la memoria , pero si quieren que un acto de este tipo se utilice con intereses partidistas, nosotros no estamos dispuestos», añaden.