Nico Williams debutó con el primer equipo del Athletic en el final de la temporada pasada con 18 años. Disputó dos partidos en los que salió desde el banquillo y cumplió el sueño de jugar juntos que perseguía con su hermano Iñaki. Regresó al filial de Joseba Etxeberria para buscar el ascenso, pero cayeron en la última eliminatoria ante el Burgos.

Marcelino no dudó en citarlo para la pretemporada junto a otros «cachorros» y no tardó en decidir que se quedara con el primer equipo. Nico Williams es un futbolista que llama la atención por su velocidad y capacidad de regate en el uno contra uno. Su talento se vislumbraba desde categorías inferiores, pero al llegar al Bilbao Athletic siguió creciendo y aprendiendo.

Etxeberria le pidió que lanzara los penaltis para mejorar cara al gol y concluyó la temporada con nueve tantos, siendo uno de los máximos goleadores del equipo. El pequeño de los hermanos Williams destaca mucho sobre el campo por el atrevimiento que desprende. Ese desparpajo juvenil que provoca que pasen cosas, aunque a veces se pueda pasar de largo.

Marcelino le ha utilizado para revitalizar el ataque rojiblanco en los segundos tiempos. En lo que va de Liga ha participado en los siete partidos disputados. En todos ellos, ha salido desde el banquillo, menos ante el Rayo que fue titular. Según ha comentado, le pide que tenga más pausa a la hora de definir el último pase o en la finalización. En el duelo contra los de Vallecas dispuso de una clara ocasión a pase de Raúl García, pero su remate se marchó fuera.

Nico Williams suele jugar de extremo por la derecha, aunque no tiene ningún problema para jugar por el otro costado. Incluso, ha jugado por el centro durante su etapa de formación. Es un jugador ambidiestro y es capaz de escapar del adversario por cualquier lado.

El espejo de su hermano mayor

En su «debut» en la sala de prensa de Lezama, Nico Williams admitía que ha recibido asesoramiento antes de salir ante los medios. Pese a los nervios del estreno, ha mostrado su agradecimiento a sus progenitores y a su hermano mayor por el esfuerzo realizado y los valores que le han transmitido. Sus progenitores emigraron desde África a Europa huyendo de la guerra de Liberia y tras superar todo tipo de adversidades fueron apadrinados por un sacerdote bilbaino. Por eso nació Iñaki en la capital vizcaina y tiene ese nombre. Después por motivos laborales se desplazaron a Iruñea, ciudad en la que nació el hermano menor.

Nico señalaba que Iñaki es un referente para él y que es el que más le aprieta las gomas para que tenga los pies en el suelo. Reconocía que ha sido bien recibido en el vestuario rojiblanco y ha insistido en que seguirá trabajando con humildad para jugar durante muchos años en el Athletic.

Añadía que como futbolista le gusta mucho Mbappé por su movilidad en ataque y que también se fija en su hermano mayor. Iñaki Williams batirá ante el Alavés el récord de partidos consecutivos disputados en Liga. Serán 203 ya que no se pierde un encuentro desde abril de 2016.

Balenziaga sigue convaleciente

El lateral izquierdo tuvo que ser sustituido en Valencia por las dolencias que arrastraba tras recibir un golpe. Por tercer entrenamiento consecutivo no ha participado en la sesión con el resto del grupo y su presencia se complica para el derbi ante el Alavés.

Lekue ocupó su puesto entrando De Marcos en el lateral derecho. En el partido ante el Rayo también jugó el de Deusto de lateral izquierdo. A pesar de los problemas en esas posiciones, con Yuri recuperándose todavía de la lesión, Capa y Petxarroman no han debutado todavía en competición oficial.

Asimismo, Sancet y Yeray han vuelto a entrenar junto con todos sus compañeros al igual que Muniain. El capitán también fue cambiado en Mestalla por problemas físicos.

Yeray aprovechará el próximo parón de la competición -el Athletic no jugará hasta el fin de semana del 23 de octubre- para realizar la «puesta a punto». En el caso de Sancet habrá que esperar si está en condiciones y Marcelino entiende que necesita al navarro en ataque para intentar doblegar al Alavés.